Por deshielos quedan al descubierto 15 nuevas especies en la Antártica

Los investigadores que lideraron el hallazgo viajan a bordo del rompehielos Polarsten, que navega por el Mar de Weddell, donde en los últimos años se han desprendido unos 10.000 kilómetros cuadrados de glaciares por el calentamiento del planeta.

Ellos son parte de la expedición Censo de la Vida Marina Antártica que ha permitido constatar los cambios que el calentamiento del planeta ha provocando en estos ecosistemas helados.

El coordinador internacional de este programa, el escocés Michael Stoddart, explicó que entre las especies nuevas figuran crustáceos como gambas gigantes, medusas o anémonas de mar, y centenares de organismos microscópicos.

Además del deshielo en esta zona, los cambios en el clima han provocado alteraciones en los hábitat, de manera que se han localizado animales y plantas que, hasta ahora, sólo se habían visto en aguas más cálidas.

Las consecuencias del calentamiento global son más manifiestas en los animales que viven en la superficie antártica, como los pingüinos Adelia, que se están desplazando hacia el sur en busca de tierras y aguas más frías. “El calentamiento repercutirá de manera muy negativa en los animales del Antártico, pero las especies se adaptan a los cambios, siempre que tengan alimentos, y en el caso de los pingüinos, éstos se alimentan básicamente de krill, y no se espera que vayan a desaparecer”, indicó el experto escocés.

Stoddart consideró que las consecuencias del cambio climático no serán tan dramáticas en el Antártico como en el Ártico, donde según algunos científicos, como el oceanógrafo alemán Eberhard Fahrbach, el hielo podría desaparecer durante las épocas de verano a partir del año 2080.

En el Antártico, afirma Stoddart, los cambios afectarán en mayor medida a las zonas costeras que a las situadas más al sur y provocarán más desprendimientos de capas de hielo que se irán hacia el mar.