Celco admite que crisis en Licantén complica escenario a planta de Valdivia

Por  Carlos González Isla

No hay una fecha definida, pero la Comisión Regional del Medio Ambiente (Corema) de la Región de Los Lagos próximamente deberá pronunciarse sobre el aumento de la producción de la planta Valdivia de Celulosa Arauco y Constitución (Celco), teniendo como telón de fondo la crisis ecológica que se vive en el río Mataquito, Región del Maule, donde cientos de peces han muerto a escasos kilómetros de la planta Licancel, de la misma firma.

Consultado por El Mostrador.cl el gerente de Asuntos Corporativos y Comerciales de Celco, Charles Kimber, señaló que obviamente el “contexto mediático incide” en lo que respecta a las decisiones que se deberán adoptar en Valdivia, donde existe una restricción desde 2005, luego que se produjera el deterioro del humedal del río Cruces y la masiva muerte de cisnes de cuello negro.

Actualmente la planta Valdivia puede producir solamente el 80% de su capacidad, establecida en la Resolución de Calificación Ambiental (RCA), medida que sería levantada una vez que la empresa demuestre que el control de sus parámetros ambientales son manejados con total seguridad.

“Eventos como estos nos frustran, sin embargo, esta es una empresa grande que tiene muchas actividades industriales y tenemos que enfrentar los temas en cada una de las regiones y en cada una de las plantas con seriedad y transparencia”, dijo Kimber.

“Como dijo (usted) mediáticamente incide, pero el análisis que tienen que hacer en Valdivia es un análisis técnico (…) En el caso puntual de la planta Valdivia las autoridades están analizando todos los antecedentes que hemos entregados a objeto de poder retomar la capacidad de producción que esa planta tiene permitido operar”, añadió.

Según explicó el lunes el director de la Comisión Nacional del Medio Ambiente (Conama) de Los Lagos, Nelson Bustos, a este medio, la planta está funcionando sin problemas y acatando las disposiciones de la autoridad, sin embargo, el levantamiento de las sanciones se hará sólo si hay un “consenso técnico amplio”.

Al respecto, este miércoles, Celco entregará un Estudio de Impacto Ambiental (EIA) relativo al tratamiento de residuos industriales líquidos, el cual deberá ser analizado y considerado a la hora de aumentar la producción en un 100%.

Episodio en Licancel

En torno al episodio de Licancel, Kimber explicó que el gerente del Área de Celulosa de Celco se hizo cargo de la planta en Licantén, Región del Maule, tras el despido de tres altos ejecutivos y que hasta este martes no han tenido mayores contactos con autoridades locales.

Consultado por la posibilidad de incorporar mayor tecnología a Licancel, pese a que es la menor de las unidades productivas, después de Valdivia y Nueva Aldea, en la Región del Bio-Bio, explicó que tras las mejoras incorporadas al tratamiento de efluentes el año pasado no hay pensando nada adicional.

“No vemos que hayan inversiones adicionales que hacer en lo que es el tratamiento de las aguas de la planta. Hay que recordar que el evento que hemos declarado es con respecto a las anomalías en el proceso de puesta en marcha (tras un período de mantención), no tiene nada que ver con lo que sería la operación normal de la planta de celulosa”, dijo.

“Esta es una planta, si bien se construyó el año 1992, cuenta con tecnología reciente, no es de la misma tecnología de Nueva Aldea y Valdivia, sin embargo, cumple muy bien con su performance ambiental y lo que ha sucedido ahora es una mala práctica en la puesta en marcha”, agregó.

El ejecutivo precisó que efectivamente no han reconocido su culpabilidad en lo sucedido en el río Mataquito, que sólo saben que se excedieron en algunos parámetros ambientales,