Enap fortalece presencia en negocio de generación eléctrica y del gas natural

El Gobierno mantendrá el apoyo a la petrolera. Para ello envió al Congreso un proyecto de ley que permitirá inyectarle capital fresco por US$400 millones. Fuente: El Sur de Concepción, 1 de agosto de 2016.


La Empresa Nacional del Petróleo (Enap) seguirá apostando a ganador. Con más de tres años de utilidades que promedian los US$600 millones, la posibilidad cierta de contar en el corto plazo con una inyección de capital fresco por US$400 millones para inversiones y asociaciones estratégicas que han fortalecido su negocio en el gas natural y la generación eléctrica, la petrolera estatal ha sorteado estos últimos tres años, con el viento a su favor.

Tras las celebraciones por el medio siglo de la Refinería Biobío, que oficialmente se cumplió este viernes y a las que asistieron autoridades de gobierno, parlamentarios, representantes de empresas, dirigentes vecinales y sindicales, ejecutivos y trabajadores, el gerente general de Enap, Marcelo Tokman habló de los principales proyectos en los que está embarcada hoy la petrolera estatal.

En relación a la planta local, dijo que la Región y el país seguirán dependiendo de esta refinería lo que implica exigencias importantes en al menos dos dimensiones. La primera, responder a la creciente demanda y consumo energético de la Región y la zona centro- sur del país, lo que exige desarrollar proyectos que están en carpeta y otros que ya tienen cierto grado de avance y que en conjunto significarán un desembolso de más de US$700 millones.

Destaca entre estas obras una nueva unidad de Desasfaltado que se encuentra en su etapa final de ingeniería, la que debiera permitir al año 2022, maximizar la conversión de crudo. Lo que se busca es disminuir la producción de fuel oil y aumentar al máximo la producción de productos valiosos como el diésel y la gasolina, en casi un 35% y reducir la de fuel oil en un 75%. Para esto también es importante la unidad de Isomerización, que cumplirá el mismo objetivo, con una inversión conjunta de US$400 millones.

En segundo lugar están las materias que tienen que ver con mitigación de impactos ambientales, a lo que se destinan más de US$100 millones, especial en materia de olores y emisiones de material particulado. Este plan está en plena ejecución, con un monto que suma US$57 millones en el periodo 2015-2016. Prontamente se inaugurará, además, la puesta en operación de un nuevo estanque para aguas ácidas que permitirá reducir ruidos molestos cuando se produzcan imprevistos y tener una operación más eficiente y estable de las operaciones. A ello se sumará la pavimentación de todas las calles interiores de la refinería por US$24 millones, entre otras obras y mejoras.

En cuanto a los resultados financieros, las proyecciones de la compañía son igualar o superar este año sus utilidades. «A la fecha estamos logrando lo que teníamos presupuestado y que en resumen es un Ebita de US$600 millones. El año pasado fue sobre US$700 millones. El objetivo es dejar completamente estabilizado los resultados evitando bajar de ese piso», precisó el ejecutivo.

La principal contribución proviene de las refinerías que han logrado mejores márgenes por la caída en el precio del petróleo.

Marcelo Tokman reitera que si bien se avanza en un fuerte plan de inversiones que en 2014 llegó a los US$400 millones, el año pasado alcanzó los US$635 millones y este año esperan llegar a los US$790 millones, lo que a juicio del gerente general «pone mucha presión desde el punto de vista de una empresa que está altamente endeudada».

Por eso es que el Gobierno proyecta contribuir al financiamiento de la empresa a través de dos decisiones, según detalla el ejecutivo: Una, postergar el reparto de dividendos y permitir la reinversión, tal como ha ocurrido en los últimos años y dos, aportar capital fresco por US$400 millones contemplados en un proyecto de ley que está actualmente en el Congreso. A eso se suma además, lo que la ley de presupuestos considera que es un subsidio al consumo de gas en Magallanes.

Para el gerente de la petrolera, «estas son señales que reafirman a los mercados financieros que el Estado de Chile está detrás de su empresa de energía, lo que permite asumir endeudamientos a tasas muy favorables no solo por el hecho de que las finanzas de la empresa han mejorado y que hay un plan estratégico que se está logrando y ejecutando de acuerdo al cronograma, y que incluso ahora cuando la caja financiera del país está con más estrechez, se mantiene este compromiso y se presenta al Congreso el proyecto de ley que aporta estos US$400 millones a la empresa».

Reservas certificadas

Las operaciones en Magallanes que han permitido no solo el descubrimiento sino la confirmación de importantes reservas de gas natural no convencional (tail gas y shale gas) y que ya certificaron Enap, como el Servicio Geológico de Estados Unidos con reservas superiores a los 10 trillones de pies cúbicos (TCF) de gas, viabilizan el Plan Estratégico 2025 en su negocio energético.

Confirmado lo anterior, ahora viene construir operaciones que se sustenten en el tiempo y eso también se planificó en distintas etapas, explica Tokman.

La primera tenía que ver con la explotación de Arenal, área norte en la isla de Tierra del Fuego y cuyo objetivo era satisfacer los requerimientos de los magallánicos. «Ahí hemos avanzado bien, hay más de 100 pozos gasíferos perforados con una producción que supera los 1,5 millones de m3/día, lo que nos permitió adelantarnos un objetivo para el 2017 y que era ser capaces de satisfacer con producción propia la demanda total de los magallánicos por los próximos 20 años».

Este aumento de la producción ha generado excedentes equivalentes a 600 millones de m3 a Methanex. «Gracias a estos buenos resultados pudimos celebrar esta semana un convenio de suministro de gas a 2018 de manera que ellos tengan más certeza para poner en marcha su planta que debió cerrar tres de cuatro trenes de producción y otros dos los desmanteló y se los llevó a EE.UU, para aprovechar el boom del shale gas y tras la falta de gas argentino».

La tercera etapa, aunque de más largo aliento, es ser capaces de exportar desde Magallanes al resto de Chile. Para esto hay varias y más eficientes alternativas que se están trabajando en distintas etapas de desarrollo, entre estas el transporte marítimo de GNL a menor escala desde Magallanes o a través de los gasoductos desde Argentina. «Esto requiere optimizar las operaciones y proveer el gas de manera competitiva. Estamos viendo oportunidades gigantescas que requieren todavía desafíos muy importantes pero son oportunidades que si lo hacemos bien van a hacer sustentable esa operación y nos van a permitir además proveerle gas desde Magallanes al resto de Chile», afirmó.

Otro hito no menor, ya que constituye el cierre de una historia no exenta de vaivenes como fue el intercambio de gas con Argentina, es el nuevo comienzo en la integración energética con Argentina.

Al respecto, Tokman reveló que «se nos pidió por parte de los ministros de Energía de ambos países tanto a Enap, como a Enarsa, coordinar una exportación de gas a Argentina. Colocamos gas propio de GNL Quintero, nos coordinamos con Metrogas y Endesa, por el lado de GasAndes y por el norte con Engie para que ellos vendiesen su gas utilizando su infraestructura de transporte existente y ese es un hito muy importante, porque es una muestra de la reanudación de la integración energética y de que estos intercambios pueden ir en cualquiera de las dos direcciones. Esto coincide con lo que se está haciendo con la exportación de electricidad desde el norte a Argentina, así es que estamos en un momento en que está habiendo una revitalización y fortalecimiento de la integración energética con Argentina».

Destacó en este mismo sentido que en el lado argentino de Gasoducto del Pacífico, hay operaciones exitosas de gas no convencional en la provincia de Neuquén, el problema es que ellos tienen restricciones en sus sistemas de gasoductos para transportar su gas hacia el este y llegar a los grandes centros de consumo argentinos. Eso significa que a pesar de tener muchos recursos bajo tierra y perforaciones exitosas están teniendo que detener la producción. Han iniciado un proceso para eliminar esos cuellos de botella que les tomaría unos 18 meses más y la posibilidad vista por Enap es comprar ese gas que tendrían que inyectar al Gasoducto del Pacífico en vez de traer el gas en camiones y a cambio se les exporta la misma cantidad de gas a través de GasAndes por el norte. Se está en conversaciones con YPF y viendo cuáles son los precios que cerrarían esta operación, adelantó el ejecutivo.

Licitaciones eléctricas

Enap, entró derechamente esta reciente semana al negocio de la generación eléctrica, participando como una más de las 84 empresas en la licitación de suministro eléctrico del CdecSIC, con tres proyectos distintos. Una, en asociación con Mitsui, con la generadora de ciclo combinado Nueva Era en la refinería Aconcagua, otro en virtud de los excedentes que tendrán a partir del próximo año con la co-generadora en construcción en Concón, que generará 72 MW de los cuáles solo 35MW serán para consumo propio y los excedentes se entregaran al SIC y un tercero, en sociedad con la italiana Enel, con su proyecto de geotermia que se construye en la comuna de Ollague y que debiera entrar en producción el próximo año, la más alta en el mundo sobre los 4 mil metros de altura sobre nivel del mar.

Marcelo Tokman confía en que Enap se adjudicará algún troncal importante, ya que sus ofertas de precios están muy por debajo de los US$95/Mw, promedio de la licitación anterior.

«Este año esperamos llegar a los US$790 millones en inversiones, lo que pone mucha presión desde el punto de vista de una empresa que está altamente endeudada».

La principal contribución a los ingresos de la petrolera proviene de las refinerías que han logrado mejores márgenes por la caída en el precio del petróleo.


Publicado en: Resumen de prensa

Etiquetas:

Los comentarios están cerrados.