Organizaciones ambientalistas celebran la entrega de recursos a regiones contemplada en el royalty minero, pero recuerdan que la responsabilidad de costear el daño ambiental generado es de las mineras, llamando a no destinar los recursos fiscales recaudados a compensar ese costo. Para Telye Yurisch, economista de Fundación Terram, “no se entiende que con la recaudación de un royalty, que representa una compensación para el Estado por la explotación de nuestros recursos minerales, se pretenda compensar el daño ambiental que genera la misma industria extractiva. Son recursos fiscales que podrían financiar programas de derechos sociales, como subsidios de vivienda, construcción de hospitales, entre otros”. Fuente: El Desconcierto, 20 de mayo de 2023.