Paola Vasconi, de la Fundación Terram, aseguró a Tierramérica que, en 2006, la gubernamental Comisión Regional del Medio Ambiente de Santiago intentó prohibir este tipo de instalaciones, pero la Comisión Nacional lo evitó, cediendo a presiones de los distribuidores.
Hoy se elabora una normativa más estricta. Vasconi afirmó que el uso va en aumento y no existen laboratorios que certifiquen el cumplimiento de las normas de emisión (4,5 gramos de humo por hora) y que la leña utilizada no está certificada.