A 5 meses de intoxicaciones en Quintero, no hay datos oficiales sobre gases contaminantes

Foto: Archivo Terram.

Ante falta de resultados del equipo Miran y de un cromatógrafo, el Ministerio del Medio Ambiente entregó nuevos detectores a ese municipio y a los de Puchuncaví y Concón. Fuente: El Mercurio. 16 enero de 2019.


«Cuando ocurre un evento de algún olor en esta comunidad, no sabemos qué pasa. Esto nos ha mantenido disconformes», comentó la alcaldesa de Puchuncaví, Eliana Olmos, luego de recibir uno de los nuevos equipos portátiles multigases que le entregó ayer el Ministerio del Medio Ambiente.

Los aparatos, marca Cetci, que también fueron cedidos en comodato a las municipalidades de Quintero y Concón, son capaces de detectar seis gases (oxígeno, ácido sulfhídrico, cloro gaseoso, monóxido de carbono, amoníaco y metano, además de compuestos orgánicos volátiles totales) y medir la temperatura y la humedad.

Según el intendente de Valparaíso, Jorge Martínez, con ellos se busca crear una primera línea de seguridad ambiental, en la que personal municipal capacitado pueda reaccionar ante una emergencia de malos olores, concurrir al lugar y determinar rápidamente de qué gas se trata y su nocividad.

La expectativa de la edil Olmos es que ayuden a desentrañar qué gases específicos están exponiendo a los habitantes a intoxicaciones como las que, desde el 21 de agosto pasado, han afectado a 1.359 personas. ‘Esperamos que nos ayuden a saber qué estamos respirando y qué daños puede ocasionar esto que respiramos y que no corresponde. Y enfocarnos a los exámenes y tratamientos adecuados’, dijo.

A cinco meses de que comenzaran los episodios, saber qué compuestos orgánicos volátiles fueron sus causantes todavía es una incógnita que ni siquiera ha podido despejar la Corte de Apelaciones de Valparaíso, que a raíz de los daños ocasionados a la salud, tramita 12 recursos de protección interpuestos por 850 vecinos, dos municipalidades, el senador Francisco Chahuán y ocho ONG.

Ante esa instancia, el Gobierno descartó la fiabilidad de los resultados iniciales que arrojó el primer equipo detector utilizado, el Miran XL, que acusó la presencia de nitrobenceno, isobutano y metilcloroformo.

El argumento de la autoridad es que ninguno de los químicos detectados superó el nivel de sensibilidad mínimo (80%) que el Miran XL requiere para arrojar un resultado fiable.

La ONG FIMA, sin embargo, presentó a la Corte un análisis de información obtenida de la Superintendencia del Medio Ambiente, la que pone en duda esa versión.

Elaborado por las científicas Fernanda Salinas, PhD en Ecología, y Zoe Fleming, PhD en Química Atmosférica, el informe indica que las instrucciones del fabricante no dan cuenta de esa limitación.

Para el director de FIMA, Ezio Costa, 14 compuestos detectados en 156 mediciones; entre ellos, los tres inicialmente hechos públicos, ‘se descartaron en base a un índice inexistente’.

De un segundo equipo llevado a la zona, un cromatógrafo, ni el intendente Martínez ni la seremi del Medio Ambiente, Victoria Gazmuri, pudieron precisar sus resultados, aunque se aseguró que los está recopilando para usarlos en un informe final.

Martínez sí adelantó que hoy el Instituto Noruego de Investigación del Aire entregará resultados preliminares de la ‘huella digital’ (finger print) de la atmósfera de Quintero y Puchuncaví, un perfil de sus contaminantes atmosféricos que busca ser determinado ‘con certeza absoluta y transparencia’, según las autoridades.

El Plan de Descontaminación enviado a la Contraloría propuso metas de reducción para dióxido de azufre, material particulado y óxidos de nitrógeno, que vienen siendo medidos por la red de monitoreo. Para el caso de los compuestos orgánicos volátiles —de los que se sospecha causaron las intoxicaciones—, estableció medidas de control en espera de que puedan ser precisados y cuantificados por la nueva red de monitoreo que se piensa instalar en la zona con apoyo del gobierno de Finlandia.

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