La necesidad que devela la donación de tierras de Tompkins: El déficit de guardaparques llega al 75%

Chile tiene un Sistema Nacional de Áreas Silvestres Protegidas del Estado, administrado por la Corporación Nacional Forestal (Conaf), que tiene en la actualidad 104 unidades, distribuidas en 41 parques nacionales, 46 reservas nacionales y 17 monumentos naturales.

A la riqueza natural de Chile se sumaron 407 mil hectáreas de verdes parajes en la zona austral del país, con la donación de la fundación Tompkins Conservation al Estado de Chile que se convirtió en la mayor entrega de tierras privadas en el mundo.

A raíz de este traspaso, oficializado por la esposa del fallecido conservacionista, el director ejecutivo de la Conaf, José Manuel Rebolledo, reconoció que este nuevo territorio que componen el Parque Pumalín y Patagonia, constituye dos nuevos desafíos que están basados en la infraestructura y la gestión.

“Conaf tiene 450 guardaparques a nivel nacional, (incluyendo a los que trabajarán) ahora con los de Tompkins, para atender 14,7 millones de hectáreas. Es muy poco. Un estudio nos muestra que necesitamos 1.500 adicionales para hacer un servicio como corresponde”, dijo a T13.

Por lo que los 450 guardaparques representan tan sólo el 25% del total de funcionarios que se necesitan a lo largo del país, lo que significa que actualmente existe un déficit del 75% de ellos.

Ante ello, Rebolledo manifestó que se está trabajando con el Instituto Nacional de la Juventud (Injuv) a través del Ministerio de Desarrollo Social, gracias al cual “el año pasado 2.940 jóvenes, chiquillas y chiquillos, trabajaron de Arica a Punta Arenas. En el verano trabajaron en el sur y en el invierno, en el norte, mejorando senderos, señalética, por ejemplo”. Agregó: “Estamos haciendo convenios con universidades focalizando de manera tal de poder contar con más gente”.

Además, según explicó, el mayor problema que se presenta a la hora de cubrir esta necesidad en los parques a lo largo de Chile es “presupuestario”. Y formuló una autocrítica: “Nosotros hemos sido los responsables de no ser capaces de vender la oportunidad que tenemos nosotros en desarrollo local”.

Hace 10 años, un millón de personas visitaban los parques del país; hoy, tres millones, a diciembre de 2018. “(Los turistas) han crecido 350% en los últimos años y el presupuesto no ha crecido”, manifestó el director.

Salud “compatible” y licencia clase B

Según información proporcionada por la Conaf a Emol, hay diferentes exigencias para poder desempeñarse como guardaparques profesional y no profesional en el país. Para los primeros, se pide contar con un título profesional certificado de “ingeniero/a en conservación de recursos naturales o ambientales, ingeniero forestal, biólogo, médico veterinario y carreras afines al área de recursos naturales o ambientales”. Además, una experiencia laboral de dos años en “actividades o proyectos relacionados con conservación de los recursos naturales y/o fauna silvestre de ASP (Áreas Silvestres Protegidas), manejo de áreas protegidas, medioambiente, de uso público, nociones de planificación territorial, formulación y evaluación de proyectos y experiencia en monitoreo de especies de fauna silvestre”.

Asimismo se exige “capacitación en áreas silvestres protegidas, catastro y prospección de recursos naturales, fauna, flora, geología, geomorfología, medioambiente, entre otros afines. (…) También en planificación en turismo o en general uso público, planificación territorial, en temas relativos a vinculación con comunidades indígenas, elaboración y evaluación de proyectos, entre otras atingentes a la profesión”.

Otro de los requisitos fundamentales es tener un estado de salud “compatible” con las exigencias del cargo y licencia de conducir Clase B.

Para los interesados en postular para desempeñarse como guardaparques no profesional, se requiere “preferentemente” enseñanza media completa, experiencia laboral en actividades o proyectos relacionados con conservación de los recursos naturales y culturales de Áreas Silvestres Protegidas. También, a lo menos una temporada trabajada en Parques Nacionales, Reservas Nacionales o Monumentos Naturale y un certificado que acredite que tiene una salud compatible con las exigencias del cargo, acreditado por un certificado de salud de un Organismo Administrador de la Ley 16.744 de accidentes laborales y enfermedades profesionales. Este documento deberá ser presentado sólo por aquellos postulantes que pasan a la III etapa de selección.