Este jueves el gobierno chileno presentará las metas de reducción de emisiones a la ONU, transformándose en uno de los primeros países en actualizarlas. ¿Pendientes? Cómo se bajará una meta nacional al nivel local. Fuente: Diario Financiero, 7 de abril de 2020.
En 2015, 195 países firmaron el Acuerdo de París para combatir el cambio climático. Este pacto contempla la figura de la Contribución Nacionalmente Determinada (NDC, su sigla en inglés), donde cada país entrega formalmente sus compromisos para alcanzar la carbono neutralidad a 2050. Cada cinco años, las naciones suscritas deben entregar una actualización de su NDC de cara a 2030, por lo que este año se llevará a cabo la recepción de las primeras actualizaciones, donde Chile será, a su vez, uno de los primeros en hacer llegar las suyas a las Naciones Unidas.
Este jueves los ministros de Medio Ambiente, Energía, y Ciencia -Carolina Schmidt, Juan Carlos Jobet y Andrés Couve, respectivamente-, a través de un seminario online, pondrán a disposición de la secretaria ejecutiva de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, Patricia Espinosa, el plan chileno a diez años plazo. La propuesta se dio a conocer en octubre y en diciembre fue actualizada, tras someterse a consulta pública. Los compromisos contemplan que Chile reducirá en 24% las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) a 2030, en comparación a 2016, como medida no condicionada, alcanzando así 97 mil megatoneladas de CO2 (MMton) en diez años más con el peak en 2027. Un plan anclado en la descarbonización de las centrales eléctricas.
En materia forestal, en tanto, se compromete la reforestación de 200.000 hectáreas de bosques, entre otras medidas. Tres expertos Marina Hermosilla, Andrés Pica y Sebastián Tolvett entregan sus expectativas en la antesala de la entrega de la actualización ante la ONU, y aseguran que si bien el documento va por el camino correcto, todavía existen materias por profundizar.
ANDRÉS PICA, CENTRO DE CAMBIO GLOBAL UC: ‘No es una meta inviable’
El director ejecutivo del Centro de Cambio Global UC, dice que la NDC ‘tiene un nivel de ambición mucho más alto que el que tenía antes’. No es una meta ‘inviable y no quita incentivos, pero no es un compromiso que le va a costar en el neto a la economía chilena. De hecho, Chile va a ser más rico si cumple la NDC’. Plantea Tracker, climática Acuerdo de París, la NDC de Chile a 2030 es ‘altamente insuficiente’, pero si actualiza el compromiso en función de un objetivo incondicional -que se cumple sí o sí- para ese año, se elevaría la calificación a ‘insuficiente’. Esto significaría un ‘giro importante en el timón’, ya que las metas ahora se contemplan de forma incondicional y no ligadas al crecimiento del PIB como antes. ‘El desafío es definir una estrategia sobre cómo se va a llevar a cabo la reducción de emisiones’, dice
MARINA HERMOSILLA, CLG CHILE: ‘Las NDC se deben hacer cargo de la realidad actual del país’
La directora ejecutiva del Grupo de Líderes Empresariales por la Acción Climática (CLG Chile), Marina Hermosilla, plantea que el estallido social y el coronavirus deben considerarse en los compromisos de Chile frente al cambio climático, ‘pero eso, lejos de ser una dificultad, es una oportunidad’. Dice que si bien la propuesta es más ambiciosa que la anterior -debido a la salida prematura de dos centrales generadoras de Engie acelerando el proceso de descarbonización-, asegura que ‘la reducción de emisiones por desaceleración de la economía no es mayor ambición’ en el contexto actual. ‘Yo esperaría que la NDC se hagan cargo de la realidad actual del país’, ya que este escenario debería ser un puntapié inicial para el desarrollo de los instrumentos financieros y económicos ‘que van a permitir transitar a Chile hacia la carbono neutralidad a 2050’. Indica que varias empresas, como Enel, Engie y Aguas Andinas, han informado que la contingencia a partir de octubre no cambia la estrategia hacia la carbono neutralidad.
SEBASTIÁN TOLVETT, DEL (CR)2: ‘Hay que ver cómo se aterrizan las metas nacionales a nivel local’
El investigador del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia, CR2, explica que las NDC tienen ‘un nivel de ambición interesante, pero la duda cae en cómo se van a cumplir estas medidas’. Dice que en el marco del Acuerdo de París no se ha concluido la generación de grandes multas en caso de no cumplirse las metas, por lo que el rol del monitoreo es clave en la meta de descarbonización a 2050. Plantea que en el caso de las grandes compañías, ya hay caminos definidos para cumplirlas, por ejemplo, con el cierre de las termoeléctricas. No obstante, se requiere apoyar a las pequeñas y medianas empresas y mostrarles el camino, ‘pero para eso, (el plan) tiene que estar bien aterrizado, cómo se aterriza la meta nacional a nivel local’.
Otro aspecto a mejorar, dice, es la meta del carbono negro -el hollín- fijada en las NDC en una reducción de entre un 10% a 25% a 2030, respecto de 2016. ‘Si se aplican medidas más ambiciosas -como, por ejemplo, la reducción de la contaminación por combustión a leña, que libera cerca del 40% de este tipo de emisiones-, esas reducciones podrían ser del orden del 60%’.