Se profundiza el debate en torno a la pesca de arrastre

Foto: OK Diario.

Primero fue la ley de la jibia. Este año ha sido la discusión por la ley de la merluza. Siempre la pesca de arrastre es un tema que vuelve a aparecer entre quienes la defienden, la rechazan o quienes creen que se puede seguir practicando, pero con mayor tecnología y mejores prácticas en favor de la sustentabilidad. Fuente: El Día, 29 de junio de 2021.


La ley de la Jibia abrió la discusión sobre la pesca de arrastre en 2019, cuando finalmente el congreso aprobó el cuerpo legal que se refiere a que dicho molusco puede capturarse solo por sistema potera o línea de mano –es decir- utilizando un ‘grupo de anzuelos’, para realizar una pesca más selectiva.

El objetivo, de acuerdo a la abogada Javiera Toro, era ‘proteger la sustentabilidad de la jibia y evitar la sobreexplotación de otros recursos’.

Hoy, en 2021, la discusión de la ‘Ley de la merluza’, que también busca prohibir la pesca de arrastre, reabrió el debate, que vuelve a enfrentar principalmente al sector industrial y la pesca artesanal.

‘Todos los artes (sistemas) de pesca que ingresan al mar son invasivos. Hay varios tipos: arrastre, espinel, trampas, cerco, entre otros. También hay unos más selectivos de especies que otros, pero para eso también se han desarrollado tecnologías. El sistema de arrastre está vilipendiando en Chile por malas prácticas que se hacían hace 30 ó 40 años’, dice Osciel Velásquez, presidente de la Sociedad Nacional de pesca (Sonapesca).

Por su parte, Pascual Aguilera, presidente de la Cooperativa de la Jibia y dirigente de Fetramar Elqui, señala que la pesca de arrastre ‘es nefasta, por el daño que provoca a los ecosistemas marinos, la destrucción del fondo, disminución de los recursos y eso dando origen a la pesca ilegal’.

LOS FACTORES A CONSIDERAR

Osciel Velásquez asegura que el sector se está certificando con mejores prácticas, con sellos como el de MSC (Marine Stewardchip Council), ampliamente conocido en el mundo.

‘Hay muchos requisitos, por lo menos son 46. Se evalúa la biomasa, el estado del recurso, la gobernanza y la sustentabilidad. Se está certificando a todas las pesqueras de arrastre que hay en el mundo y que son sustentables. La pesca de arrastre representa el 90% del consumo humano de pescados y mariscos a nivel nacional, lo que no es menor y sobre todo en pandemia’, dice Velásquez.

Para Pascual Aguilera, los efectos de la pesca de arrastre se ven en la disponibilidad del recurso.

‘La pesca artesanal podría desaparecer. Cada día vemos como los recursos agonizan, no entender esto es no entender nada. Por este motivo, se tiene que actuar ahora ya y terminar con una pesca que nos dice que quedan muy pocos recursos. Estamos invadidos por flotas extranjeras’, acusa Aguilera.

En cuanto a la región, el presidente de Sonapesca destaca que acá se concentra la mayoría de la pesca de crustáceos. ‘Los langostinos colorados están a 300 a 350 mts y de los 350 a 500 mts de profundidad están los camarones, entonces para sacar estos recursos en forma sustentable las empresas de crustáceos han tenido que cambiar su arte de pesca: del arte antiguo que pesaba 5 toneladas, hoy pesa el 10%, unos 500 a 600 kilos, para impactar menos el fondo marino’, señala respecto a algunas medidas que las empresas han realizado.

Para el dirigente de Fetramar Elqui esto no es suficiente. ‘Le pediríamos a las empresas que hagan lo mismo para el caso de la merluza que se hizo con la ley de la jibia, donde se exigió la reconversión de sus flotas a barcos poteros. En la pesca de arrastre de la merluza debe hacerse lo mismo, mientras no demuestren que su arte y sus redes no son nefastas. Seguiremos pensando que la pesca de arrastre debe terminar’, argumenta.

Y así Velásquez, desde la contraparte, afirma que de acuerdo a ‘estudios hechos por la Universidad Católica del Norte, es importante decir que acá no tenemos arrecifes de coral ni peces de colores. Acá tenemos fondos de arena y fango, que es donde están los crustáceos’.

Pese a los desacuerdos, el presidente de Sonapesca agrega que ambos sectores deben subsistir. ‘Son importantes para el país. Acá hay pesca costera que debe hacerlo la pesca artesanal, y hay pesca costera más adentro que la hace la pesca industrial, ambos son importantes para el crecimiento y alimentar al país’.

Han existido muchas instancias de diálogo, pero cada cual tiene su mirada. ‘El industrial siempre dirá que es sustentable, pero los hechos demuestran lo contrario. Por su parte, el académico también tiene su visión y el sector artesanal tiene su mirada desde la experiencia, viendo que los recursos son cada vez menos y que cada día hay que recorrer mayor distancia para ir a buscarlos y eso es consecuencia de la sobreexplotación’, concluye Pascual Aguilera.

Recuadro
‘Se está certificando a todas las pesqueras de arrastre que hay en el mundo y que son sustentables. La pesca de arrastre representa el 90% del consumo humano de pescados y mariscos a nivel nacional, lo que no es menor y sobre todo en pandemia’, Osciel Velásquez, presidente de Sonapesca.

‘La pesca de arrastre es nefasta, por el daño que provoca a los ecosistemas marinos, la destrucción del fondo, disminución de los recursos y eso dando origen a la pesca ilegal’, Pascual Aguilera, dirigente de Fetramar Elqui.

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