El anuncio se dio durante la visita del ministro de Obras Públicas, Alfredo Moreno, al Embalse El Yeso, la principal reserva de agua para la ciudad. Si bien ésta se encuentra en el 80% de su capacidad máxima, “esto ha sido posible solo gracias a la gestión eficiente en la cuenca, la redistribución del recurso y el trabajo colaborativo entre la compañía y los canalistas de la primera sección del río Maipo”, aseguró la empresa.

Lo cierto, puntualizó Aguas Andinas, es que “la ausencia de precipitaciones de agua y nieve en la zona central han mermado la disponibilidad hídrica”.

Por ello se decidió activar “el estado de alerta temprana preventiva debido a la condición de escasez hídrica en la cuenca del río Maipo y del río Mapocho“, confirmó Cristián Schwerter, director de Planificación, Ingeniería y Construcción de la sanitaria.

Esto “no tiene efecto respecto del abastecimiento hacia la población, pero sí nos permite estar en una condición más vigilante respecto de lo que ocurre en los sistemas y gatillar acciones para poder enfrentar de mejor forma el proceso que se viene respecto a una condición más crítica en estas dos cuenca”, explicó.

Esta semana el Ministerio de Obras Públicas informó que el recién finalizado mes de julio fue uno de los tres más secos en los últimos 72 años, según el balance hídrico de la cartera y la Dirección Meteorológica de Chile.

“Esta es la peor sequía de la historia. En julio llovió 0,6 mm, y no tuvimos acumulación de nieve. Estamos con peores indicadores que incluso en 2019″, alertó el ministro Moreno, y “por esta razón estamos trabajando junto a las sanitarias con medidas excepcionales de cara a la hipersequía”.

En ese marco, “gracias a las diversas obras de Aguas Andinas como la Planta de Padre Hurtado y Pozos de Cerro Negro – Lo Mena, además del trabajo colaborativo con los regantes, hoy estamos mejor preparados frente a esta situación”, subrayó.

Proyecto para evitar cortes ante episodios de turbiedad

En la misma instancia, la sanitaria anunció el proyecto El Manzano-Toma Independiente, cuyo objetivo será otorgar mayor autonomía en episodios de turbiedad extrema, como ocurrió con el río atmosférico de enero pasado.

Con una inversión cercana a los 35.000 millones de pesos, esta obra forma parte de la tercera fase del Plan de Resiliencia, validado por la Superintendencia de Servicios Sanitarios, que según Aguas Andinas permitirá una autonomía de abastecimiento de agua potable de 48 horas y hasta los 3 meses para la zona abastecida por el río Maipo.

La idea es encontrar una nueva captación de agua cruda desde el río El Yeso, 5,7 kilómetros aguas arriba desde la actual toma independiente del río Maipo. Desde allí, el flujo será conducido evitando el cauce del río mediante un ducto hasta la planta de producción Las Vizcachas, gracias a lo cual el agua llegará sin los cuantiosos sedimentos que arrastra en épocas de lluvias convectivas y aluviones, explicó.