El Mercurio Calama, 25 de noviembre de 2012. Queñoa y Cardón son especies vulnerables según estado conservatorio. Nuestro suelo desértico muchas veces no propicia las condiciones...
El Mercurio Calama, 25 de noviembre de 2012. Queñoa y Cardón son especies vulnerables según estado conservatorio.
Nuestro suelo desértico muchas veces no propicia las condiciones necesarias para tener una abundante flora nativa. Sin embargo, existen especies en nuestra zona que son capaces de crecer hasta a 5 mil metros de altura en condiciones extremas, como es el caso de la Queñoa, un árbol que se encuentra en estado vulnerable porque las poblaciones colindantes a su hábitat se han encargado de destruirlo. Así mismo pasa con la especie de cactus Cardón, distribuida en los sectores precordilleranos, sobreviviendo en altitudes que van desde los 2600a 4100 metros sobre el nivel del mar.
«Es importante que la comunidad sepa que hoy como Conaf estamos tratando de preservar estas dos especies, a través del cultivo de ellos en nuestro ‘Centro Ecológico’ ubicado en las dependencias de la minera Radomiro Tomic de Codelco. Con la finalidad de buscar las mejores formas de propagarla, ya sea a través de semillas o por estaca (pedacito de árbol) en el caso de la Queñoa, con las pretensiones de utilizarlos en proyectos de reforestación en su hábitat natural», explicó, José Reyes, investigador de la corporación.
ESPECIES
En Chile existen dos especies protegidas por la ley del bosque nativo, debido a su estado de conservación vulnerable y corresponden al tipo Queñoa denominadas Polylepis rugulosa y Polylepis tarapacana, siendo esta última la única presente en la cordillera de la 11 Región de Antofagasta, la distribución más al sur de la especie.
La especie Polylepis tarapacana, se encuentra clasificada legalmente en categoría de conservación vulnerable, permitiendo el desarrollo de actividades con fines únicamente de preservación. Y esta especie es capaz de crecer de 1 hasta 7 metros de altura, totalmente adaptados a las condiciones climáticas y medioambientales extremas que caracterizan el área altoandina, como fluctuaciones de temperaturas de hasta 20 o 30°C, alta radiación, escasez de oxigeno y escasas precipitaciones.
El Cardón es otra especie de importancia ecológica y cultural en nuestra región, corresponde a la comúnmente llamada Cardón, cuyo nombre científico es Echinopsis atacamensis, distribuida en los sectores altoandinos y precordilleranos, en altitudes que van desde los 2600 a 4100 m.s.n.m. Esta corresponde a un cactus que puede alcanzar los 7 metros de altura y es posible verlos en las laderas de los cerros. Este cactus cuando florece exhibe unas hermosas flores blancas en sus brazos, cuyo fruto es comestible y de un sabor agradablemente dulce.