Los puntos críticos del impacto del agro

El tema ambiental dominará la actividad agrícola en los próximos años. Enfrentarlo significa racionalizar las normas, invertir en tecnología y mejorar en capacitación.; Revista del Campo 16 de marzo de 2009.;

La voz de alerta sonó en Buin el año pasado. Los trabajadores de una plantación de nogales se equivocaron y en vez de aplicar agroquímicos desde afuera hacia el centro del recinto lo hicieron al revés, lo que causó que parte del producto cayera en el sitio colindante a la plantación. El problema fue que allí había una escuela y alumnos en clases. La mayoría fue alertada por el olor, pero no faltaron los intoxicados.

También son de larga data los conflictos que tienen los planteles de crianza de animales con las comunidades vecinas o con otras actividades productivas, como las viñas, por los desechos que redundan en mal olor y moscas. Los últimos campos de batalla han sido Marchigüe y Casablanca.

Y el problema no es sólo chileno. En Nueva Zelandia, potencia en ganadería, se comprobó que la mitad de las emisiones de metano, dióxido de carbono y óxido nitroso de ese país oceánico provienen de la actividad agropecuaria.

Aunque el común de las personas asocia los problemas ambientales a las ciudades, la agricultura también tiene efectos medioambientales negativos. Contamina.

Y pese a que Chile ha progresado en los últimos años en este tema, especialmente en los rubros que están orientados a la exportación, ya que debe cumplir rigurosos estándares de los países consumidores, el flanco medioambiental potencialmente puede convertirse en una pesadilla o en una oportunidad para diferenciarse de los competidores.

Más aún, el difícil escenario económico actual podría incrementar los proteccionismos y, debido a las exigencias de los consumidores, las exigencias ambientales convertirse en la excusa preferida.

"El tema ambiental va a dominar en los próximos años. Es el desafío que hay que cumplir. Es una exigencia de privado a privado. No es el gobierno de Estados Unidos el que pide cumplir con normas y reglamentos, sino los supermercados", señala Gustavo Rojas, director de posgrado de la Universidad Tecnológica Inacap.

Por eso la Revista del Campo inaugura una serie de reportajes respecto de la contaminación, que tocará temas como la legislación y las soluciones usadas en otros países.

Hay varios puntos críticos que condicionan la aparición de estos problemas, como una inadecuada normativa en cuanto a los usos de la tierra, no disponer de tecnología apropiada, malas prácticas en algunos casos y poca centralización de las normativas.

El suelo mal repartido

La agricultura entra en colisión con otras actividades económicas como la minería o sus labores diarias se ven complicadas por el crecimiento de las ciudades, lo cual tiene que ver con una limitada legislación que regula el uso de la tierra.

El ejemplo del colegio funcionando al lado de un predio frutícola lo demuestra.

"No tenemos una política general aplicada de uso de suelos. Siempre va a existir competencia por los recursos – pasa en la III Región entre agricultura y minería- y debe ser la autoridad quien zanje esas discusiones, pero eso no está dirimido con políticas claras, sino a través de acuerdos entre privados", explica Leonel Sierralta gerente de desarrollo de la empresa Gestión Ambiental Consultores.

Una más acabada segmentación territorial sería la fórmula para atacar el problema.

falta de Tecnología

En otros casos lo que se hace necesario es mayor inversión tecnológica para prevenir los efectos negativos o procesar los desechos originados en la producción.

Un ejemplo es el nivel de respeto de las normativas que rigen la descarga de riles a un curso de agua.

"El nivel de incumplimiento bordea el 40%. Las empresas judicializan las decisiones y se pierden años en el juzgado y en que la Corte Suprema vuelva a ratificar que es correcto lo que se está haciendo", explica Paola Vasconi, Coordinadora del Programa de Medio Ambiente de Terram.

La producción de cerdos y las lecherías, gracias a acuerdos de producción limpia desarrollados con el gobierno y por la apertura de mercados, tiene altos estándares.

"Casi el 80% de la producción chilena de carne de cerdo está con tecnología de punta, el problema es que el 20% restante, de menor tamaño, no tiene las mismas características", señala Ximena Ruz, jefa del departamento de acuerdos del Consejo de Producción Limpia. Ruz recalca que Agrosuper, por ejemplo, fue la primera agroindustria a nivel mundial, en poner en venta bonos de carbono.

Es lo que pasa también con la industria frutícola.

"La actividad frutícola de exportación se adhiere a normativas ambientales de todos los principales mercados en forma simultánea, con medidas que van desde el control sistemático de los envases vacíos de agroquímicos, hasta balances anuales de su uso, lo que excede la normativa legal vigente chilena, y disminuye fuertemente los riesgos de contaminación de las personas y el medio ambiente. Incluso están empezando a estimar la huella de carbono", explica Ricardo Carrasco, director del Programa de Bioenergía de Fundación Chile.

Entonces, el problema de acceso a tecnología estaría en los planteles de menor tamaño.

Y lo insólito es que obras de ingeniería relativamente simples como los vertederos escasean.

"Chile tiene un gran déficit de rellenos sanitarios y de vertederos en general. A lo largo de todo el país cuesta mucho encontrar donde botar la basura. El tema va por mejorar los lugares de recolección y de depositación, ese es el gran vacío que tenemos", explica Leonel Sierralta gerente de desarrollo de la empresa Gestión Ambiental Consultores.

más capacitación

Otro punto, que como el anterior tiene que ver también con el tamaño de la explotación, es mejorar diversas prácticas de producción, en cuanto a cómo se riega y cómo se aplican los agroquímicos.

"Puede que individualmente no sean tan importantes, pero cuando se juntan varios se va generando una contaminación mayor", explica Patricio Parra, ingeniero agrónomo de la división de estudios y desarrollo de la Comisión Nacional de Riego.

El problema estaría, por ejemplo, en los pequeños productores de frutas y hortalizas, quienes ya sea por falta de una adecuada capacitación o de recursos derivados de su tamaño, o por lo difícil que se hace fiscalizarlos, cometen estas faltas.

"El SAG realizó un programa de monitoreo de plaguicidas en vegetales en el año 2007, y que consistió en un análisis de 374 muestras de frutas y hortalizas obtenidas en el mercado interno desde Arica hasta Chiloé, y descubrió que el 20,3% de las hortalizas y el 11,5% de las frutas tenía residuos de plaguicidas por sobre la norma de la Unión Europea", señala María Eliana Rozas, coordinadora nacional de Rapal en Chile, red de acción en plaguicidas.

normas dispersas

Pero no todo es culpa de los agricultores. Falta también centralizar las normativas. Legislación ambiental hay en Chile, el problema es que están dispersas y eso confunde a los productores, en especial a los pequeños.

"Creo que uno de los problemas más grandes es que no hay coordinación entre los organismos que norman y los agricultores no saben dónde tiene que recurrir", explica Patricio Parra.

Son los factores que condicionan los problemas medioambientales actuales. Solucionarlos significará darle más valor al sector agrícola.

Los Efectos principales

DIVERSAS SON LAS FORMAS EN QUE LA AGRICULTURA CONTAMINA LAS AGUAS.

UNA DE ELLAS ES EL USO DE AGROQUÍMICOS EN EL CULTIVO DE FRUTAS Y HORTALIZAS, TANTO FERTILIZANTES O PLAGUICIDAS QUE AFECTEN LA CALIDAD DE LAS AGUAS Y DE LA TIERRA.

EN EL CASO DE LA APLICACIÓN DE ESTIÉRCOL, LAS AGUAS SE PUEDEN CONTAMINAR POR AGENTES PATÓGENOS.

TAMBIÉN LOS DESECHOS DE LAS GRANJAS CONTAMINAN POR LIBERACIÓN DE AGENTES PATÓGENOS COMO BACTERIAS Y VIRUS Y POR METALES, QUE PUEDEN PROVOCAR PROBLEMAS DE SALUD PÚBLICA.

CUANDO SE EFECTÚAN TALAS LA TIERRA SUFRE EROSIÓN Y, POR ENDE, SE PUEDE PRODUCIR CONTAMINACIÓN DE LOS RÍOS.

LA SILVICULTURA, EN TANTO, PRODUCE SEDIMENTACIÓN Y EROSIÓN.