
70 mil autos dejan de circular en Santiago
Medida estará vigente hasta el 31 de agosto. Intendente anunció estrategias para mejorar predicción de preemergencias, días en que dejarán de circular 6 dígitos de autos sin sello verde, 4 con convertidor catalítico y deberán paralizar 760 empresas. La Nación 01 de abril de 2009.
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Temporada de esmog, tiempos de restricción al parque automotor que en Santiago ya supera el millón 200 mil autos que generan humo, congestión y contaminación acústica.
A partir de hoy y hasta el 31 de agosto, entre 68 mil y 70 mil automóviles sin convertidor catalítico dejarán de circular diariamente por las calles de la capital debido a que rige la restricción permanente de cuatro dígitos: a riesgo de ser multados en hasta 55 mil pesos, la prohibición afectará este miércoles a los dígitos 3-4-5 y 6.
La medida es parte del Plan de Gestión de Episodios Críticos (PGEC) antiesmog, y afectará al 40% de los 171 mil autos sin sello verde que circulan en la capital.
Adicionalmente y por primera vez en la historia del PGEC, en días de preemergencia ambiental se aumentó de dos a cuatro el número de dígitos de autos con convertidor catalítico que deben dejar de transitar por la ciudad, jornadas críticas por contaminación en que, además, se aumentará de cuatro a seis dígitos la prohibición a autos sin sello verde.
A bajarse del auto
En suma, las medidas para bajar el esmog en preemergencia impedirán la circulación de 490 mil automóviles particulares, 338 mil correspondientes a vehículos con sello verde (el 40% de los 971 mil que existen hoy), y otros 102 mil autos sin convertidor catalítico.
La restricción permanente a cuatro dígitos a autos sin sello verde implica, además, que entre las 7:30 y las 21:00 horas unas 104 mil personas deberán dejar el auto en la casa y buscar alternativas para movilizarse, principalmente Metro y Transantiago.
En días de preemergencia, en tanto, la cifra de automovilistas que quedan a pie en días se eleva a 750 mil personas, generando mayor presión especialmente a Metro (ver recuadro).
Modelo de pronóstico
Otras dos aristas relevantes asoman a la hora de iniciar el período del PGEC. En jornadas de preemergencia (el año pasado se registraron seis) deberán paralizar sus faenas 760 industrias contaminantes, por lo que, junto con bajar del auto a buena parte de Santiago, el acertado modelo de pronóstico de la calidad del aire se vuelve vital.
Por lo mismo, el intendente metropolitano, Igor Garafulic, tras reunirse en la Sofofa para pedir mayor colaboración por parte de la industria para controlar el esmog, anunció ayer dos medidas para mejorar el nivel de acierto en el pronóstico de episodios críticos y así evitar eventuales errores como sucedió el año pasado cuando La Moneda debió pedir disculpas a la población.
Primero, en lugar de preparar el informe en base a los datos meteorológicos recolectados hasta las 18 horas de cada día, los expertos ampliarán hasta las 20 horas en análisis de datos.
Y segundo, debutará un sistema de radiosonda, sofisticada tecnología para medir el comportamiento a tres mil metros de altura (vientos, corrientes, presión atmosférica, etc).
Jorge Lagos, director suplente de la Conama, sostuvo que estas medidas, sobre todo la nueva tecnología, "permitirán afinar el pronóstico para ser más certeros que en años anteriores", dijo.
Garafulic, en tanto, hizo ayer un llamado a la población a cumplir con las medidas e informarse a través del fono 600 422 00 00.
Combate al smog
Entre abril y agosto de cada año, Santiago sufre con el esmog y con el frío invierno. En estos meses, la habitual mala ventilación de la cuenca de Santiago y la polución provocada por el millón 200 mil autos particulares y las miles de empresas que, por ausencia de gas natural, han debido reconvertirse al uso de carbón o petróleo, provocan niveles riesgosos de contaminación para la salud de las personas.
Esta vez, pese a las críticas de sectores ambientalistas por ausencia de medidas estructurales para combatir el aire negro, a la tradicional restricción vehicular sobre el parque de autos sin convertidor catalítico, por primera vez la autoridad implementó el aumento de dos a cuatro dígitos en la restricción a los autos con sello verde en días de preemergencia, medida que fue postergada en 2007 y 2008.
La autoridad sanitaria sostiene que “sumados, los autos y las estufas a leña contaminan más que la industria”, en tanto, la autoridad ambiental explica que la nueva restricción reduciría en poco más de 20 toneladas del tóxicos del aire (NOx), frente a las cerca de 30 toneladas que produce la industria.
A lo anterior, se suma este año un nuevo intento para mejorar la predicción de preemergencias y así evitar los errores que, en 2008, llevaron a La Moneda a pedir disculpas por dos consecutivos fallos en la predicción.
Calendario de restricción
La restricción vehicular decretada por la autoridad regional regirá de lunes a viernes, excepto festivos en los siguientes horarios:
Vehículos particulares de 07:30 a 21:00 horas y transporte de carga entre las 10 y las 18 horas, en el perímetro delimitado por la Circunvalación Américo Vespucio.
Buses rurales, buses interurbanos y vehículos adscritos a los servicios de transporte privado remunerado de pasajeros no podrán circular entre las 10 y las 16 horas.
Para el transporte escolar, en tanto, se prohibe su circulación entre las 21:00 y las 06:30 horas del día siguiente.
Los conductores que infrinjan la norma arriesgan multas que van entre 1 UTM y 1,5 UTM, es decir, entre 37 mil y 55 mil pesos.
Los autos no catalíticos deberán regirse por el siguiente calendario de restricción: Lunes prohibido circular paras los vehículos cuyas patentes terminen en 5-6-7-8; Martes: 9-0-1-2; Miércoles: 3-4-5-6; Jueves: 7-8-9-0; y Viernes: 1-2-3-4
En caso de preemergencia la restricción a los autos sin sello verde aumenta de cuatro a seis dígitos, en tanto que para los autos con sello verde sube de dos a cuatro dígitos, partiendo con las patentes terminadas en 7-8-9 y 0.
Metro proyecta aumento de densidad en sus vagones
“La restricción de dos dígitos a los catalíticos en preemergencia generó el año pasado un aumento del 5% en la afluencia de público, y este año será mayor, con un máximo de 8% en hora punta, por la restricción de cuatro dígitos”, sostuvo ayer Clemente Pérez, presidente de Metro.
“Hoy observamos densidades (dentro de los vagones) inferiores a seis personas por metro cuadrado, y probablemente volvamos a ver densidades de 6,1 a 6,3”, dijo.
El alto ejecutivo agregó que “podemos hacernos cargo, (pero) no sin algunas dificultades en el servicio”, acotó, aludiendo especialmente a los viajes desde el centro al sector oriente de la capital.
En este sentido, Pérez estimó que Metro volverá a superar la concentración de seis personas por metro cuadrado dentro de los vagones.
“Volveríamos a vernos como Metro exigido”, señaló, esperando no tener que implementar medidas de gestión de flujo de personas en torniquetes y andenes.