
Autoridad ambiental recomienda rechazar proyecto energético
El jefe de la División de Evaluación Ambiental y Participación Ciudadana del SEA (Servicio de Evaluación Ambiental), Juan Cristóbal Moscoso, emitió un Informe de Evaluación Consolidado (ICE) en el que recomendó rechazar el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de el proyecto. Fuente: News ES Euro, 25 de abril de 2024.
Se trata de la iniciativa denominada “Sistema de Transmisión Zonal Grupo 3 S/E Itahue- S/E Hualqui” que tiene una extensión de 407 km, a través de las regiones del Maule, Ñuble y Biobío, y contempla una inversión de US $324 millones. Es el segundo proyecto de transmisión eléctrica más importante que actualmente se encuentra en evaluación ambiental. El primero es Kimal-Lo Aguirre, cuya línea pretende unir Antofagasta y Santiago.
El viernes de la semana, el jefe de la División de Evaluación Ambiental y Participación Ciudadana del SEA (Servicio de Evaluación Ambiental), Juan Cristóbal Moscoso, emitió un Informe de Evaluación Consolidado (ICE) en el que recomendó rechazar el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de el proyecto. Ahora, la iniciativa está en manos de la Dirección Ejecutiva, encabezada por la abogada Valentina Durán, que deberá emitir en los próximos días una resolución que defina si se aprueba o rechaza.
En su presentación, que tiene 592 páginas, el funcionario del SEA concluyó que las medidas propuestas por el titular para hacerse cargo de los impactos del proyecto no son suficientes.
La iniciativa requiere talar 51 hectáreas de formaciones forestales nativas y 1.114 hectáreas de plantaciones forestales para la instalación de sus piezas y obras. Pero la mayor complejidad surge en el tratamiento que se le da al queule, especie forestal protegida y declarada monumento natural por la Norma DS N° 13/1995 del Ministerio de Agricultura. Sobre este punto, Conaf cuestionó duramente a la empresa y solicitó directamente rechazar la iniciativa.
El 1 de marzo de 2024, la gerente de Evaluación y Supervisión de Ecosistemas de Conaf, Elke Huss, emitió un comunicado desfavorable, señalando que el “proyecto no cumple con la legislación ambiental vigente y no se responsabiliza por los efectos, características o circunstancias establecidas en el artículo 11 de la Ley 19.300, ni los impactos generados por el proyecto”.
En su presentación enviada al SEA, la funcionaria destacó que la evaluación ambiental del propietario presenta “inconsistencias” en la cuantificación de especies forestales, como el queule (Gomortega keule) y el naranjillo (Citronella mucronata).
En el marco de la evaluación, el titular sostuvo que “en Chile no existen definiciones científicamente sustentadas del efecto borde basadas en la autoecología de cada especie. Finalmente, tomando en cuenta que en Chile aún no existen estudios científicos que permitan definir con certeza científica un efecto de borde para especies en la categoría de conservación, y que a partir de la revisión de estudios científicos de otros países en general las distancias de efecto de borde varían entre 10 metros y 50 metros, las distancias de efecto de borde propuestas son realistas”.
Ante esta afirmación, Conaf sostuvo que “lo anterior provoca un escenario de incertidumbre, respecto de la posible alteración del hábitat de los Bosques Nativos de Preservación, que podría causar daños o impactos al medio ambiente, ante lo cual la Corporación, con base en El principio de precaución, plenamente aplicable en nuestro ordenamiento jurídico, considera que el propietario no responde a lo consultado. Sumado a lo anterior, se puede comprobar que la distancia propuesta por el propietario no se cumple en todas sus obras, observándose situaciones que, según indicó el propio propietario, estarían generando alteración del hábitat.
En tanto, la Asociación Chilena de Energías Renovables y Almacenamiento, ACERA AG, gremio que agrupa a más de 150 empresas de la industria de energías renovables, expresó su profunda preocupación por el avance del proceso de evaluación ambiental del proyecto de la línea de transmisión en el tramo Hualqui. -Itahue, inició hace cuatro años, en la Dirección Ejecutiva del Servicio de Evaluación Ambiental.
“Este proyecto, que se extiende por 20 comunas de las regiones de Maule, Ñuble y Biobío, tiene como objetivo mejorar la calidad del suministro eléctrico para el suministro de energía limpia y barata a los hogares y consumidores de energía, ya que en la actualidad el sistema eléctrico de estas comunas está altamente tensionada, lo que provoca interrupciones en el suministro, mala calidad del servicio y la imposibilidad de sumar nuevos usuarios, afectando con ello el desarrollo del comercio y la industria en general y, por ende, el crecimiento de nuestra economía”, agregó.
“Su materialización es fundamental, tanto para la integración al sistema eléctrico de proyectos de energía renovable como de almacenamiento por un total de 3.700 MW, equivalentes al 11% de la capacidad instalada de generación de energía en Chile, valorada en US$ 4.000 millones. inversión, así como para la creación de más de 10.000 empleos, asociados a su construcción”, concluyó.