
Bachelet hizo mea culpa por Transantiago y prometió congelamiento de tarifa
Opositores esperabán más anuncios sobre el siestema de transporte. El discurso de la Presidenta fue bien recibido por el ministro Cortázar, no así por el presidente de la Comisión de Transportes de la AChM. Para Gustavo Hasbún, la Mandataria quedó en deuda al no referirse al tema. La Nación 22 de mayo de 2007.;;
José Miguel Jaque
Era de esperarse. El primer gran tema que tocó Michelle Bachelet en su mensaje presidencial fue el Transantiago. “Ha sido una experiencia mala y frustrante para la gran mayoría de los santiaguinos, especialmente para las personas más pobres”, expresó la Presidenta. “Las personas tienen todo el derecho a estar molestas y angustiadas, comprendo su indignación e impotencia”.
Bachelet reconoció las falencias en el diseño y la implementación, además de no considerar un pilar público de apoyo ni la gradualidad que ameritaba un cambio de la magnitud del Transantiago. También responsabilizó a los privados por el “masivo incumplimiento” de parte de actores que debían garantizar la operación del sistema. “Esto dejó en evidencia que el Estado siempre debe cumplir un rol más relevante en el transporte público”.
Después del mea culpa, vino lo bueno. Bachelet aseguró que las tarifas no subirán hasta que los usuarios no tengan un sistema que funcione con normalidad. “Por eso, a través de un proyecto de ley he solicitado al Congreso Nacional que nos apoye en este esfuerzo por un total de 290 millones de dólares en el año 2007”. Dicho proyecto será ingresado al Parlamento, según lo anunció el ministro de Transportes, René Cortázar.
La inyección de ingresos se suma a los dos proyectos de ley enviados al Parlamento. Uno que crea la Autoridad Metropolitana de Transportes que concentre las funciones de gestión, fiscalización y coordinación, y otro que establece un administrador provisional o interventor cuando caduca la concesión de un operador, asegurando la continuidad de los servicios.
El ministro Cortázar escuchó atentamente las palabras de Bachelet en su asiento en el Congreso y destacó el anuncio. “La Presidenta lo dijo hoy día en su mensaje: mientras no esté normalizado el Transantiago se va a mantener la tarifa actual”. Cortázar también se refirió al mea culpa que hizo la mandataria. “Estamos trabajando en cómo normalizar el Transantiago con metas muy concretas para ir avanzando en su normalización”.
Quien no quedó contento con la alusión de Bachelet al Transantiago fue el presidente de la Comisión de Transportes de la Asociación Chilena de Municipalidades (AChM), Gustavo Hasbún. “Qué me parece” Pero si no dijo nada”, comenta de entrada. “Decir que no se va a subir la tarifa… bueno, es que si se llega a subir la tarifa con el transporte como está, al otro día se produciría un estallido social inmanejable. Es de sentido común no llegar a pensar en subir las tarifas del Transantiago. Me hubiera gustado que exigiera al ministro Cortázar una salida definitiva a los problemas del transporte publico”.
Hasbún critica que los últimos anuncios con respecto al Transantiago los haya dado el ministro Cortázar el pasado sábado y no la propia Bachelet en su discurso de ayer ante todo el país. “Se sacó un peso de encima, pero dados los problemas sociales que existen es absurdo que no haya habido un planteamiento de parte de ella que es la Presidenta. Uno espera que lo haga la máxima autoridad del país y no un ministro, sin desmerecer a Cortázar. Hubiera sido un golpe de autoridad porque no tiene sentido escuchar a un ministro que no da garantías de que los problemas se vayan a solucionar. Bachelet quedó en deuda al no referirse al tema”.
“LE QUITÓ EL PISO A LA ESTATIZACIÓN”
“Me llamó la atención que partiera con el tema del Transantiago y solamente reafirmara lo que dijo el ministro Cortázar el sábado. Era la oportunidad de hablarle al país pero no fue así”, comentó Gabriel Martínez, gerente general de Transaraucarias. “Fue sólo recordar que ya se trazó un camino con el envío al Parlamento del proyecto solicitando recursos, el que crea la Autoridad metropolitana de Transportes y el de la figura del administrador provisional”.
Según Gabriel Martínez, “uno puede leer a veces lo que no se dice. Por ejemplo, el tema de la estatización del Transantiago que plantearon los parlamentarios. El no decirlo es una manera de quitarle el piso a esa propuesta”.