
Mapa: los lugares más afectados con la peor sequía de los últimos cien años
Es la que más ha durado y la que ha abarcado más territorio, explica René Garreaud, científico del Centro del Clima y la Resiliencia de la Universidad de Chile. Fuente: Las Ultimas Noticias, 10 de noviembre, 2015.
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Triste, pero cierto: las nubes ya no están bien dibujadas en invierno. Ni siquiera asoman como bosquejos. Los prados tampoco tienen ese olorcillo a tierra recién mojada. Y los árboles frutales, peor aún, ya no se revientan en primavera.
Es una situación preocupante, aterradora a decir verdad, pero es la pura y santa verdad. Según los científicos del Centro del Clima y la Resiliencia de la Universidad de Chile, la responsable es la infame megasequía que castiga al país. Así lo aseguran en el flamante informe “La megasequía 2010-2015: una lección para el futuro”.
La más larga en 100 años . René Garreaud, doctor en Ciencias de la Atmósfera de la University of Washington, Estados Unidos, y coordinador del documento, detalla que esta falta de lluvia nos acompaña desde el 2010. “En la investigación nos dimos cuenta que es la más larga de las sequías que han afectado a Chile. Ya lleva cinco años. En los registros históricos no encontramos ninguna así. El período seco de los sesenta, por ejemplo, sólo fue de tres años: comenzó en 1967 y terminó en 1969”. Y la de 1998, que causó coletazos en la generación de energía eléctrica, puesto que ésta depende de centrales hidroeléctricas instaladas en embalses, sólo comprendió diez meses: desde noviembre de 1998 a agosto de 1999.
También se trata de la más extensa: la faja de tierra que abarca va desde la Región de Atacama hasta la Región de la Araucanía.
¿Por qué ocurrió esta tragedia? Una de las causas es el cambio climático antrópico, es decir, los efectos provocados por el aumento de la concentración de gases de efecto invernadero y la disminución del ozono en la estratosfera.
El científico lo explica así: “El aumento del dióxido de carbono en el aire provoca un calentamiento global. Éste repercute en el desplazamiento de las zonas donde ocurrían las precipitaciones. Eso significa que las lluvias se están moviendo hacia el sur. Por lo tanto en la zona central ya no llueve con la misma frecuencia e intensidad de antaño. En otras palabras: el clima mediterráneo (lluvias concentradas en invierno) de estas regiones se parece cada vez más, debido a este desplazamiento, al clima semi-árido del sector sur del Norte Chico”.
Las zonas más afectadas, detalla Garreaud, quien tiene un magíster en Ciencias de la Geofísica en la Universidad de Chile, corresponde al trozo de tierra que va desde la Quinta a la Sexta Región. “El fenómeno es muy expandido. Por tanto no es posible determinar localidades específicas. Las estadísticas de Graneros y Pichidegua, por ejemplo, son iguales. Pero sí se puede plantear que la zona donde está el núcleo corresponde al Valle Central. Ahí la sequía no ha dado tregua. Ese sector, en promedio, registra un déficit de precipitaciones de un 35% con respecto al histórico que se calcula entre el año 70 y el 2000”.
Consecuencia: más incendios forestales . Esto ocurre porque las temperaturas en el ambiente son mayores en tanto que las precipitaciones son menores. El combo es letal: más calor y menos lluvia. “La superficie forestal quemada en la zona centro sur ha aumentado un 70% durante los últimos cinco años. Y el número de incendios se incrementó en un 27% respecto al promedio histórico”.
Más: los ríos, debido a la falta de lluvia, redujeron su caudal. “El déficit promedio de las regiones de Coquimbo y Valparaíso alcanzó un máximo de 70%. Y el volumen del embalse La Paloma, ubicado al sureste de Ovalle, se encuentra en sus mínimos históricos”.
¿Cómo diablos se sabe todo esto? “La base de datos que usamos corresponde al registro de las mil estaciones de medición de precipitación que tiene Chile”, devela Garreaud. “Estas cuentan con un recipiente cilíndrico (pluviómetro) que mide la cantidad de lluvia que cae en un lugar y un espacio de tiempo determinado”.