
Stand by en El Tatio: La urgencia que se llevó el viento
Recién en marzo próximo comenzará la investigación de los expertos internacionales para determinar si hay daño en los géiser.;El Diario Financiero, 24 de diciembre 2009.
Lea noticia relacionada: Géiseres del Tatio deberían ser declarados Monumento Natural y Santuario de la Naturaleza.
Transcurridos más de tres meses desde que se produjo la fuga de vapor y sales minerales desde uno de los pozos de exploración geotérmica en la zona turística de El Tatio, en la Región de Antofagasta, la urgencia pública que produjo este incidente se esfumó tal como lo hizo la polémica fumarola una vez que se controló el episodio.
Los últimos días de septiembre y los primeros de octubre, los detalles de la fuga y la actuación de Geotérmica del Norte (GDN) -ligada a la italiana ENEL, junto a las estatales ENAP y en menor medida a Codelco- estuvieron en el centro de la actividad y no fueron pocos los que exigieron esclarecer las circunstancias del incidente y el eventual daño ambiental en la zona.
Incluso, se llegó a cuestionar la viabilidad y el futuro de la energía geotérmica en el país, pese a que su desarrollo aún es incipiente y se calcula que su potencial permitiría generar varios miles de MW.
Aunque la anunciada investigación a cargo de expertos internacionales ni siquiera se inicia, del acalorado debate y la preocupación por el futuro de los géiser de El Tatio, que incluso involucró a personalidades como el empresario Pedro Ibáñez, casi no quedan huellas. De hecho, de acuerdo con datos de la administración del campo turístico el flujo de turistas no se ha visto impactado.
Iba todo tan bien…
La erogación, denominación correcta para lo que sucedió en el pozo 10 de la Quebrada del Zoquete, que es una zona próxima al área turística de El Tatio, se hizo pública el 21 de septiembre pasado. En la mira estaba la columna de vapor y sales minerales, que se alzaba a 60 metros de altura en las inmediaciones de uno de los más importantes polos de interés turístico del país.
En ese momento en GDN explicaron que para hacer en forma más eficiente las pruebas de producción, decidieron reinyectar el vapor que sacarían. El pozo 10, ubicado en la denominada Plataforma Corfo, fue el escogido y falló porque la infraestructura -que data desde hace unos 30 años- no resistió la presión del flujo.
Acción en tres frentes
Declarada la emergencia, el 1 de octubre la Comisión Regional de Medioambiente (Corema) ordenó paralizar indefinidamente los trabajos, excepto los relacionados con el control de la fumarola, hasta que haya claridad de la situación.
Luego, el tema se dividió.El primer frente fueron los dos procesos sancionatorios que la Corema abrió a partir de denuncias del SAG, Sernageomin, Conaf y la DGA, por incumplimientos en las condiciones en que se aprobó el proyecto. En la instancia explicaron que tras agrupar los procesos y haber recibido los descargos de la empresa podrían resolver, pero hay algo pendiente.
En segundo lugar y luego que el 4 de octubre GDN controló la fuga, el Consejo de Defensa del Estado inició una investigación para determinar el daño ocasionado. Entre las diligencia estuvo una visita inspectiva a la zona. A ello se sumaron pericias a cargo del Ministerio Público.
En el CDE informaron que si bien ya tienen informes consolidados de los organismos con competencia ambiental vinculados, la falta de jurisprudencia respecto de este tipo de contaminación los mantiene a la espera.
Y precisamente es este tercer frente el que mantiene expectante a todos los involucrados en el tema. Se trata de la investigación que será encargada a peritos extranjeros y que financiará la Comisión Nacional de Energía (CNE). La ida es contar con profesionales que tengan experiencia en este tipo de energía y en situaciones como ésta.
Hace un par de semanas un comité técnico, que incluye a la Conama nacional y regional, así como a la CNE, designó a los consultores: Zosimo Sarmiento (Filipinas), James Southon (Nueva Zelanda), Halldór Armannsson (Islandia) quienes fueron propuestos por el PNUD, que recibirá el informe de los consultores.
Una señal de que la urgencia ya se disipó es que los expertos comenzarán a trabajar en marzo, razón por la que El Tatio seguirá stand by.