El interés internacional por la explotación minera de los fondos marinos se ha avivado gracias a la combinación de nuevos avances en robótica, cartografía informática y perforación submarina, junto con precios históricamente altos pero fluctuantes de las materias primas. Empresas mineras de todo el mundo están buscando nuevas fuentes de metales y minerales tras haber agotado gran parte de las reservas de fácil acceso del mundo. Más de una docena de países, como Rusia, Reino Unido, India y China, tienen contratos de exploración de 15 años. Sin embargo, cada vez más biólogos marinos, defensores de los océanos, reguladores gubernamentales y empresas sensibilizadas están dando la voz de alarma sobre una serie de problemas medioambientales, de seguridad ali-mentaria, financieros y de biodiversidad asociados a la extracción submarina. Fuente: El Desconcierto, 26 de octubre de 2021.