
Terram denuncia hostilidad contra la sociedad civil en Cumbre de Copenhague
Fundación Terram denuncia la hostilidad de la que han sido víctima representantes de las organizaciones ciudadanas de todo el orbe en el desarrollo de la cumbre sobre cambio climático COP 15, que se desarrolla hasta este viernes en la capital danesa. Prensa Terram, 16 de diciembre 2009.
Luz María Fariña, coordinadora de proyectos de Fundación Terram y que ha sido testigo presencial de la cumbre desde su inicio, la semana pasada, señala que “la decisión de limitar el acceso a Bella Center resta transparencia al acuerdo mundial sobre cambio climático que se está elaborando. Han quedado fuera representantes de la sociedad civil que ya estaban acreditados y aquellos que llegaron a Copenhague durante la segunda semana de la Conferencia, periodo crucial en el que deben cerrarse los acuerdos. Los representantes de la sociedad civil fuimos informados sobre las nuevas medidas de seguridad impuestas por Naciones Unidas vía electrónica, sin mayores explicaciones. Prácticamente cada día se nos informa de nuevos procedimientos de acreditación, con lo que se ha restringido cada vez más la cantidad de personas que pueden acceder al centro. Dejar fuera a más del 80% de los representantes de la sociedad civil es una imposición antidemocrática que atenta contra la participación ciudadana. Además, esta pauta de seguridad ha dificultado enormemente el cumplimiento de las agendas de trabajo que se habían planificado con anterioridad por parte de la sociedad civil”.
Respecto al ambiente en la ciudad de Copenhague, la representante de Terram señala: “ha habido un sinnúmero de manifestaciones y marchas en distintos puntos de la ciudad, en los cuales la policía ha actuado de manera agresiva; sólo el día de hoy se han reportado más de 200 detenidos, que se suman a las 400 del día sábado, durante el Día de Acción Mundial. Además, para el desarrollo de esta conferencia se ha aprobado en Copenhague un permiso temporal que permite a la policía algo similar a la “detención por sospecha”, con lo que constantemente y de modo reiterativo hay un chequeo de identificación. Esto ha incrementado el ambiente hostil para las personas que pretenden ser parte de la Cumbre oficial”.
Estos hechos han contribuido a generar un clima de tensión y confirma la sensación de que las negociaciones se celebran a espaldas de la ciudadanía.
Respecto a la delegación chilena, la declaración de buenas intenciones de la Ministra Ana Lya Uriarte se han quedado sólo en palabras, pues no ha sabido jugar un rol significativo, además de negarse a tomar contacto con los representantes de las ONG’s chilenas en Copenhague: Anamuri, Caritas Chile, Acción AG, CODEFF, además de Fundación Terram.