Se acabó el plazo: Comunidades evitaron que compañía minera activara concesión en Parque Andino Juncal, sitio estratégico para la biodiversidad y los recursos hídricos
By Comunicaciones

Se acabó el plazo: Comunidades evitaron que compañía minera activara concesión en Parque Andino Juncal, sitio estratégico para la biodiversidad y los recursos hídricos

La empresa minera Nutrex SpA tenía plazo hasta la medianoche de ayer para ingresar a los terrenos del Parque Andino Juncal y monumentar su pertenencia minera para exploración y explotación, sin embargo, no pudo hacerlo debido a la resistencia pacífica de distintas organizaciones. Si bien la compañía puede reiniciar el proceso, los defensores del parque, y también autoridades, consideran que se gana tiempo para lograr la protección de ese territorio de la región de Valparaíso, donde existen glaciares de hielo y roca, humedales, esteros, así como diversidad de flora y fauna. Fuente: País Circular, 17 de abril de 2024.

Ubicado en el Valle de Aconcagua, en la Región de Valparaíso, el Parque Andino Juncal es un área protegida privada de 13.796 hectáreas, que pertenece desde 1911 a la familia Kenrick, hoy, Comunidad Kenrick Lyon. Administrado por Catherine Kenrick, el proyecto Parque Andino Juncal cumple los objetivos de proteger y preservar los ecosistemas naturales, realizar actividad científica y fomentar el turismo responsable, siempre que sea compatible con su conservación.

Es un lugar de valor incalculable para las comunidades aledañas, que en los últimos meses se agruparon, con el apoyo de la familia Kenrick, para defender el parque de lo que consideran la amenaza que supone la intervención de la Minera Nutrex SpA. Y es que la empresa estadounidense adquirió 15 concesiones para exploración y explotación minera -cobre y oro- en 8.300 hectáreas del lugar, lo que pone en riesgo la flora, fauna y recursos hídricos d el Parque Andino Juncal, ubicado en el Valle Juncal, en la comuna de Los Andes.

Por lo mismo, la agenda noticiosa estuvo marcada en las últimas semanas por la resistencia pacífica de distintas organizaciones, que impidieron la entrada de la Minera SpA, aun cuando ésta llegó con fuerza pública en más de una oportunidad. Ello, producto de una orden emitida por el Primer Juzgado Civil de Los Andes que se lo permitía.

“Tenemos registros de actividades mineras de Nutrex SpA, ya sea administrativas u operaciones en terreno, desde 2017 aproximadamente en el Valle Juncal”, cuenta Jorge Morales, vocero de la Coordinadora Defensa Aconcagua. Según el investigador, la primera etapa del denominado Proyecto Caliente consistió en la construcción de plataformas de perforación.

“En ese contexto, el titular del proyecto consultó al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) que, si hacía 20 plataformas de perforación, tenía o no que ingresar al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA). El SEA dijo que no era necesario, por ende, solo tenía que activar los permisos ambientales sectoriales. Este proyecto terminó aproximadamente en 2020 y la información que tenemos es que no les dio resultados muy positivos. Es decir, no encontraron un mineral muy generoso”, agrega Morales sobre la génesis de esta polémica.

“Sin embargo, como ellos son dueños de más de 50 pertenencias en el Valle Juncal, decidieron pasar a las siguientes, que principalmente están dentro del terreno del Parque Andino Juncal. De hecho, más del 70% de esas pertenencias están sobre glaciares del Parque Andino Juncal”, destaca el activista de Coordinadora Defensa Aconcagua.

El objetivo de Nutrex SpA en los últimos meses ha sido desplegarse, con el fin de monumentar varias de esas pertenencias al interior del Parque Andino Juncal. La monumentación de una pertenencia minera es un requisito indispensable, desde el punto de vista administrativo, para cerrar el proceso de la debida titularidad o dominio de dicha pertenencia minera. Si la acción de monumentar no se ejecuta, no se consigna la pertenencia minera a su nombre, en este caso, a nombre de Minera Nutrex SpA.

“Si eso se llega a materializar, de ahí en adelante le pueden pasar la aplanadora por encima al Parque Andino Juncal, porque van a ser dueños de la pertenencia minera. Por lo tanto, estarían en condiciones de perforar para hacer introspección minera. Y/o, después de eso, hacer la explotación de un mineral, que es donde vino la alerta. De acuerdo al Código Minero y al Código de Aguas, cualquier titular de una pertenencia minera, en el ejercicio del desarrollo de actividades asociadas a la minería, puede hacer uso del agua habida o encontrada en el lugar, para ese propósito. Sin tener titularidad [de un derecho de aprovechamiento] del agua. No tiene que ser dueño del agua para poder ocuparla”, explica Morales.

Con este antecedente sobre la mesa, las organizaciones comenzaron a movilizarse, ante la amenaza de un posible uso indiscriminado de un bien común, como es el agua. Pero además abogando por la riqueza en flora y fauna que allí cohabita.

Y ayer, 16 de abril, fue un día clave, ya que a la medianoche venció el plazo para que se materializara la pertenencia minera, tras 15 meses contados desde la presentación de la solicitud de concesión. “Al ocurrir esto, la empresa tendrá que reiniciar el proceso, pero eso les va a llevar tiempo, por lo menos un año. Es una primera batalla ganada”, señala el vocero de Coordinadora Defensa Aconcagua.

 

Catherine Kenrick y Tomás Dinges, del Parque Andino Juncal, junto a la alcaldesa de San Felipe, Carmen Castillo (al centro).

Principal fuente de agua

El Parque Juncal, que limita con Argentina por el oriente, es un ecosistema de montaña compuesto por altas cumbres, glaciares de nieve y roca, humedales, esteros y otros cursos de agua, que permiten la existencia de variada flora y fauna.

El terreno representa aproximadamente dos tercios del Valle Juncal y abarca altitudes desde 2.300 a más de 5.000 metros sobre el nivel del mar. Allí se encuentran 49 glaciares, incluido el glaciar Juncal, fuente principal del río Aconcagua, que a su vez es la fuente primordial de agua para la Región de Valparaíso.

“El Parque Andino Juncal representa prácticamente el 20% de los glaciares de este valle de Aconcagua. Un 15% de ellos se encuentran dentro de este parque. Por lo tanto, para nosotros es un tema muy sensible, porque es agua dulce que se vierte al río Aconcagua y que provee de agua a todos los habitantes de la Región de Valparaíso”, expresa la alcaldesa de San Felipe, Carmen Castillo.

“Es una amenaza el que una empresa minera quiera intervenir este parque andino, precisamente porque le produce un daño a toda la provisión de agua del río Aconcagua”, añade la jefa comunal, quien subraya el riesgo que corre todo el ecosistema en la zona. “Son aguas nacientes las que provienen del Juncal y eso quiere decir que si las proteges desde arriba, van a llegar a la desembocadura de mejor calidad”, expone por su parte la Dra. Cecilia Rivera, quien lideró un estudio para la Universidad de Playa Ancha sobre la calidad del agua de todos los afluentes en el Parque Andino Juncal, desde el glaciar hasta la desembocadura.

“Queríamos saber si eran o no aguas prístinas. Esto quiere decir que son aguas naturales, sin contaminación. Pero como derivan de la cordillera y de suelo volcánico, se encontraron elementos como sodio, fósforo y aluminio”, declara sobre una de las conclusiones la académica del Laboratorio de Química Ambiental (Lab QA) de la Facultad de Ciencias Naturales y Exactas de la UPLA.

“Otro de los resultados es que en la primera parte del Juncal, donde está la minera cercana al río Blanco, se nota inmediatamente la contaminación. O sea, las mineras sí generan un efecto negativo. Estamos hablando de mitigar el cambio climático y estamos justamente haciendo lo contrario. Estas son las aguas que hay que proteger y sobre las que hay que generar más acciones, de manera que llegue mucho más limpia a todas las otras zonas, especialmente considerando que hay comunas con déficit hídrico”, enfatiza Rivera.

“No sacamos nada con proteger un humedal, por ejemplo, con la Ley de Humedales Urbanos, que son humedales al final de la cuenca, si lo primero es proteger lo de arriba, porque el de abajo está contaminado. No tiene sentido”, insiste la investigadora del HUB ambiental-UPLA.

 

Jorge Morales, vocero de la Coordinadora Defensa Aconcagua.

Valor ecosistémico

El Parque Andino Juncal alberga una gran biodiversidad, en la que destacan al menos 114 especies de flora, 11 de mamíferos, 5 de reptiles y 46 de aves, entre ellas, más de 5 migratorias.

“Desde 2016 se tienen los primeros registros por cámara trampa de guanacos en el parque y, de ahí en adelante, sus poblaciones han empezado a llegar y asentarse según temporada. Ellos normalmente bajan en invierno, pero en primavera-verano suben”, cuenta Ismael Berwart, co-fundador de la agrupación Wanaku Akunkawa.

“También hay presencia de pumas y otros mamíferos como gatos andinos, vizcachas y zorros culpeo. Y con respecto a las aves, encontramos el cóndor, el chorlo cordillerano, el picaflor de la cordillera, el jilguero cordillerano, el chirihue dorado, los churretes, los cometocinos, los chincoles y dormilonas de varios tipos, que también son migratorias. O sea, hay una fauna súper importante y muy diversa, que es representativa básicamente de lo que es la cordillera. La gracia del Parque Andino Juncal es que ha recuperado su cualidad de prístino”, indica el también sicólogo de la Municipalidad de Putaendo.

Con respecto a las aves, hay algunas experiencias especialmente llamativas. “Hace un tiempo subimos con los guardaparques a instalar unas cámaras trampa y encontramos un nido de picaflor de la cordillera. Y lo interesante es que el nido era puro pelo de guanaco y musgo, lo que da cuenta que las interacciones en el ecosistema están pasando a todo nivel. Es un ecosistema que se ha vuelto a completar, porque por veinte a treinta años el guanaco estuvo desaparecido prácticamente del territorio, por la caza o la ganadería excesivas, entre otros motivos. Entonces, que los picaflores de la cordillera estén usando el pelo de los guanacos para hacer sus nidos, demuestra cómo están vinculados los distintos seres que ahí existen”, relata Berwart.

“Además -complementa Jorge Morales-, se han encontrado procesos de anidación de la golondrina de mar, que tiene a toda la comunidad científica relacionada con la conservación de aves, con la atención puesta en el lugar. Sería la anidación más al sur y más al este que se ha encontrado hasta el minuto”.

“Eso es algo súper increíble. Según estudios de la Red de Observadores de Aves y Vida Silvestre de Chile (ROC), se pudo detectar que al parecer las golondrinas de mar tienen sus colonias de anidación más importantes en esta zona, entre río Blanco y el Parque Andino Juncal. Las golondrinas de mar son aves pelágicas, lo que significa que son aves de alta mar que viven a 40 kilómetros de la costa. Son carroñeras, se alimentan de lo que se muere en alta mar, entonces, el misterio es qué hacen estas aves aquí”, se cuestiona Berwart.

 

Cecilia Rivera, académica del Laboratorio de Química Ambiental de la UPLA.

Impactos sobre el ecosistema

Respecto a las consecuencias que podría generar la intervención de la minera Nutrex SpA, el co-fundador de la agrupación Wanaku Akunkawa anticipa un mal pronóstico para la fauna en general.

“Lo más probable es que las especies migren, pero no sé bien adónde. Por ejemplo, en río Colorado ya hay una minera operando. Después, aquí en Putaendo, Vizcachitas quiere hacer una megaminera. Entonces, toda la zona del Juncal, que está relativamente poco intervenida y que permite la existencia de todos estos seres vivos, se empezaría a fraccionar e irían quedando atrapadas las poblaciones, alternando la diversidad genética y, a la larga, los llevaría probablemente a la extinción. En el corto plazo, lo más probable es que las especies huirían a otra parte. O que transiten a zonas más bajas, por ejemplo los pumas, donde empezarían a tener problemas con la gente que tiene ganado. Ese también es un efecto de sacarlos de su espacio”, afirma el experto en fauna silvestre.

En lo que respecta al desmedro de los ecosistemas, así como a la resiliencia y seguridad hídrica en la región, Jorge Morales advierte sobre el grave escenario que podría ocurrir, de instalarse la compañía norteamericana.

Anglo American fue multada por robar agua, lo hizo en Riecillos, principal afluente del río Colorado, uno de los más importantes del río Aconcagua. Luego, la estatal Codelco Andina cometió el mismo delito en la subcuenca del río Blanco. Entonces, ¿vamos a esperar que se instale otra minera en el principal afluente del río Aconcagua, que es el Juncal? ¿De verdad estamos dispuestos si ya nos mostraron en dos ocasiones cómo se comporta la minera en el lugar? Nuestra postura es inamovible, porque ya nos enseñaron que nos van a saquear el agua”, reflexiona el vocero de la Coordinadora Defensa Aconcagua.

Cursos de acción

En cuanto a las acciones concretas, el Ministerio del Medio Ambiente (MMA) se comprometió a actuar con celeridad, de acuerdo a las medidas que anunció la titular de la cartera en un reciente encuentro con senadores, diputados, concejales y alcaldes. En esa ocasión, Maisa Rojas se comprometió a designar un grado de protección oficial para el Parque Andino Juncal, en el marco de la nueva Ley 21.600, que crea el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas (SBAP).

“Independiente de la medida de defensa corporativa a través de toda una sociedad que está presente, nosotros tuvimos la oportunidad de estar con la señora Ministra del Medio Ambiente, Maisa Rojas, en una instancia en la que pudimos analizar este tema y plantear nuestra preocupación por el Parque Andino Juncal junto a diversos actores”, expresó la alcaldesa de San Felipe, Carmen Castillo.

“En este sentido, la Ley 21.600 nos va a permitir reconocer al Parque Andino Juncal en alguna clasificación que garantice su defensa. Probablemente, a través de un Monumento Natural, que es una de las alternativas para protección de estas áreas tan sensibles para nuestra sociedad, flora, fauna y para nuestra diversidad en general”, dice la alcaldesa.

A esto se suma que, en mayo de 2010, el Parque Andino Juncal fue designado sitio de importancia internacional por la Convención Ramsar. Una iniciativa que surgió por parte de la administración del Parque Andino Juncal, en alianza con el MMA, con el fin de avalar la riqueza ecosistémica que se aloja en esta área.

“Ramsar lo reconoce, pero quien no lo reconoce es el Estado de Chile. O sea, lo que dice la ley SBAP, es que Chile tiene un plazo de cinco años para ver en qué categoría de protección ambiental lo va a enmarcar. Pero en esos cinco años puede ocurrir cualquier cosa en el Parque Andino Juncal. Por eso tenemos que ‘ponerle la corriente’ al MMA para que tome decisiones ágiles y rápidas, y asegure a la comunidad la conservación de ese lugar”, apunta Jorge Morales.

“La categoría Ramsar se sustenta en la alta biodiversidad y, en particular, en las especies altoandinas que son prácticamente únicas a nivel a mundial, así como en la riqueza de la flora y fauna endémica. Sin embargo, es un acuerdo internacional de papel y que no se está cumpliendo hoy en día”, postula por su parte Cecilia Rivera.

“El problema de Chile es que firma acuerdos y no hace inyección de capital, de infraestructura, de investigación, y al final terminan siendo acuerdos por lo bonito. Faltan políticas públicas que ayuden justamente a implementar acciones. Para mí, la solución sería que Chile despierte con respecto a los acuerdos internacionales. Y también falta una ley de protección de glaciares y otra de sitios prioritarios para la biodiversidad y el cambio climático”, sentencia la académica UPLA.

Créditos: Ismael Berwart

¿Posturas encontradas?

Con todo, desde el MMA hasta las organizaciones territoriales, la necesidad de defender del Parque Andino Juncal parece no estar en duda. Sin embargo, Jorge Morales plantea un punto que podría interferir al momento de llegar todas las autoridades a un consenso.

“Hoy día, con la entrega de recursos del royalty minero en práctica, vamos a tener que sostener otra conversación con las alcaldías, porque el rol ecosistémico que tienen lugares como el Parque Juncal, no puede ser transado por una cantidad de dinero. Sumado a que el dinero, que queda producto del royalty minero, es una migaja respecto a las utilidades de esta industria”, declara el activista.

“Aunque entendemos que la comunidad necesita esos recursos, eso es netamente producto del abandono del Estado. Entonces, que los particulares vengan a entregar recursos y a tomarse la foto, porque con ese dinero van a construir canchas de baby fútbol o van comprar cámaras para seguridad, nos parece bien, mientras la comunidad así lo defina. Pero eso probablemente va a cortar ciertos espacios de conversación con los municipios. Y eso también lo entendemos, porque tenemos un dicho: ‘Uno baila al ritmo del que pone la música’ y el que pone la música en este minuto es la minera”, añade Jorge Morales.

“Por eso, si bien creemos que hay sectores que sí apoyan el desarrollo minero, tenemos una visión antagónica al respecto, pero fundamentada, más que en la actividad, en la escala de producción. No es sostenible para las comunidades ni para los ecosistemas, que se planteen crecimientos de la industria a partir de bienes comunes finitos como el agua y que su crecimiento sea exponencial. Eso no es sostenible ni sustentable en el tiempo”, argumenta el vocero de Coordinadora Defensa Aconcagua.

Una  opinión que también comparte la alcaldesa de San Felipe. “Sobre las medidas a tomar, desde el municipio son pocas, porque no tenemos muchas facultades. Pero vemos que en este momento la compatibilización de un desarrollo minero con el Parque Juncal, es prácticamente imposible. Específicamente, porque existe una saturación del entorno en cuanto a la intervención de mineras. Por lo tanto, vemos con preocupación que otra minera más le vaya a hacer un daño enorme a nuestro entorno”, asegura Carmen Castillo.

Con respecto a la minera Nutrex SpA, hasta la fecha ningún vocero se contactó con las agrupaciones territoriales y con la administración del Parque Juncal para dialogar, solo lo hizo a objeto de hacerles saber que estaban en el ejercicio de una atribución consignada en el Código Minero. Tampoco hubo respuesta ante la solicitud de País Circular.

Créditos: Ismael Berwart
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  • 17/04/2024

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