
Denuncian a buque arrastrero de Pesca Chile por captura accidental y muerte de ballena jorobada
Una denuncia criminal contra Pesca Chile ingresó a trámite el viernes pasado ante el Juzgado de Garantía de Punta Arenas, luego de que un buque arrastrero de dicha compañía basada en esta ciudad, capturara de forma accidental y provocara la muerte de una ballena jorobada. Fuente: La Prensa Austral, 16 de abril de 2025.
Una denuncia criminal contra Pesca Chile ingresó a trámite el viernes pasado ante el Juzgado de Garantía de Punta Arenas, luego de que un buque arrastrero de dicha compañía basada en esta ciudad, capturara de forma accidental y provocara la muerte de una ballena jorobada.
El hecho aconteció el 25 de marzo pasado a bordo del buque Antarctic Endeavour durante faenas de pesca de krill en las cercanías de las Islas Orcadas del Sur, un pequeño archipiélago ubicado al noreste de la Península Antártica, a unos 1.800 km al sureste de Punta Arenas.
La denuncia fue interpuesta por María Tapia Almonacid, directora nacional del Servicio de Pesca y Acuicultura, en contra de la sociedad armadora del citado buque, en contra del patrón de la nave Stanley Dennett Morales y en contra de todos quienes resulten responsables, en calidad de autores, cómplices y encubridores, del delito contemplado en el artículo 135 bis de la Ley 18.892, de la Ley General de Pesca y Acuicultura, perpetrados en contra del interés público.
La alerta se activó desde el Instituto Antártico del Ministerio de Relaciones Exteriores, cuyo hecho fue detectado y denunciado por gente que se encontraba a bordo del buque Antarctic Endeavour, adjuntándose una serie de fotografías que dan cuenta de la captura mediante red de pesca de un ejemplar de cetáceo, produciéndose su muerte producto de la maniobra, siendo su cuerpo devuelto al mar.
Operación pesquera
Según se desprende de la denuncia, el delito se habría cometido el 25 de marzo pasado durante el virado del lance N°8 de la segunda marea de la temporada 2025, realizado por el buque arrastrero Antarctic Endeavour. “Alrededor de las 17,45 horas, en que la nave realiza la maniobra de lance para capturar krill, cuando desde la banda de estribor uno de los tripulantes de cubierta advirtió la presencia de una ballena, que andaba interactuando con la red, por lo que se trató de observarla en el agua, pero no fue avistada. Luego cuando finalmente la red del lance estuvo a bordo, la tripulación notó una forma extraña en el saco, bultos sobresalientes. En este sentido, según se pudo constatar a partir de los antecedentes remitidos a este Servicio (Sernapesca), se procedió como un lance normal, se abrió el saco y se obtuvo la muestra correspondiente. Cuando el saco se levantó para proceder a la maniobra de vaciado se pudo apreciar la cabeza de una ballena jorobada. El ejemplar medía unos 10 metros aproximadamente (estimación del contramaestre) y no se pudo determinar el sexo ya que no se observó la zona ventral. Los pliegues ventrales estaban llenos de kril y la punta de la mandíbula estaba ensangrentada. Al estar con la cabeza hacia el copo la liberación fue relativamente rápida, alrededor de las 18,10 horas se levantó el saco y el cuerpo fue deslizándose por la rampa para finalmente quedar flotando”.
Penalidad
Conforme a lo establecido en el artículo 135 bis de la Ley 18.892, “el que dé muerte o realice actividades de caza o captura de un ejemplar, de cualquier especie de cetáceos será sancionado con la pena de presidio mayor en su grado mínimo y comiso, sin perjuicio de las sanciones administrativas que correspondan de conformidad a la ley. Asimismo, el que tenga, posea, transporte, desembarque, elabore o efectúe cualquier proceso de transformación, así como comercialice o almacene estas especies vivas o muertas o parte de éstas será sancionado con la pena de comiso y presidio menor en su grado medio, sin perjuicio de las sanciones administrativas que correspondan de conformidad a la ley”.
De acuerdo al tenor literal de lo expuesto en el artículo 135 bis, y de acuerdo a los hechos relatados, en opinión del Sernapesca “queda de manifiesto la comisión de la conducta delictiva de capturar y dar muerte a un ejemplar de cetáceo, en este caso de una ballena jorobada, por parte de los denunciados, siendo autores del delito estipulado en el artículo 135 bis de la Ley General de Pesca y Acuicultura”.
El presidio mayor en su grado mínimo es una pena de cárcel que va desde los 5 años y un día a 10 años.
Sobre la responsabilidad pena de Pesca Chile S.A., armadora de la nave, la denunciante invoca el artículo 1 de la Ley 20.393, que “establece la responsabilidad penal de las personas jurídicas” en aquellos delitos contemplados en la Ley de Delitos Económicos, entre los cuales figura la Ley General de Pesca y Acuicultura.
En este caso específico, la directora nacional de Sernapesca, hizo uso de su rol de funcionaria pública, que ante el conocimiento y denuncia de delitos, le corresponde denunciar estos hechos ante el Ministerio Público, para que inicie la investigación correspondiente, con el fin de esclarecer los hechos y en caso de comprobarse la comisión de un delito de perseguir las responsabilidades penales correspondientes en contra de todos quienes resulten responsables”.
Considerando el carácter ambiental del delito denunciado, se solicita a la Fiscalía disponer se despache orden amplia de investigar a través de la Brigada Investigadora de Delitos de Medio Ambiente (Bidema) perteneciente a la PDI.
Este lunes 14 de abril, el juez Ricardo Herrera ordenó remitir los antecedentes al Ministerio Público para su conocimiento y fines pertinentes.
226 ballenas muertas en últimos 52 años en las costas chilenas
Una investigación reveló que en los últimos 52 años (1972-2023) murieron 226 ballenas en las costas chilenas. El 62% de ellas corresponde a casos en los que no se pudo determinar la causa de muerte. En los casos con causa identificables, casi un tercio, el 28% se atribuyó a colisiones con embarcaciones, seguido de un 7% a entallamientos y un 3% a depredación natural.
Considerando datos históricos desde 1972, un estudio del Centro Ideal plantea que Chile ocupa el sexto lugar en mortalidad de colisiones. Empero, si el análisis se reduce a los últimos 12 años, desde el 2013 cuando se empiezan a hacer las necropsias de manera más sistemática, Chile pasa a liderar la mortalidad por colisión con un promedio de cinco muertes de grandes cetáceos anualmente.