
Humedales de Valdivia generan diferencia entre ambientalistas y dueños de terrenos
Algunos particulares habrían rellenado tierras de sus propiedades inundadas, lo que provoca críticas de ambientalistas, que sostienen que tales bienes ya son del Estado. Fuente: El Mercurio, 1 de abril de 2019.
‘Esto es como un saqueo, es como si llegase alguien y te quitara lo que es tuyo’. Esta frase grafica la situación de diferentes personas en Valdivia que dentro de su propiedad o en sus deslindes poseen un humedal o parte de él, motivo por el que se ven imposibilitados de ejercer cualquier modificación al terreno.
Se trata de una problemática conocida en Valdivia. Tras el terremoto de 1960, cientos de hectáreas se vieron inundadas, creando docenas de humedales de diferente tamaño en áreas urbanas y rurales.
Previo a tal fenómeno, muchas de esas tierras eran productivas; pero con la llegada del agua, algunos de sus propietarios se vieron imposibilitados de ejercer cualquier intervención.
Parte de estas superficies pasaron a ser un bien fiscal a partir 1965, cuando terminó el plazo legal establecido por el artículo 653 del Código Civil.
‘Si en un plazo de 5 años no efectúa las obras necesarias para recuperar esa tierra, pasa a ser bien fiscal de uso público’, asegura Alberto Tacón, de la Agrupación Biosfera.
Tras esta situación, algunos lugarenos habrían optado por recuperar tales superficies por medio de rellenos, para luego comercializarlas como parcelas de agrado. Así lo han denunciado organizaciones ambientalistas.
‘Hay lugares muy afectados. (…) Los que quieran rellenar, evidentemente lo intentarán, y para eso está el Estado, para impedir que se cometa un delito, porque rellenar un cauce natural es un delito y está penado por la ley. La DGA puede pasar un parte e incluso puede obligar a restituir el cauce a su situación original’, explicó Tacón.
Por ello, algunos privados han pensado que se estudie una suerte de compensación a los propietarios de los terrenos donde se ubican los humedales.
‘Con el Estado de Derecho que existe actualmente, la única forma en que el fisco se podría hacer con terrenos de privados sería a través de una compensación’, dice uno de los propietarios afectados, quien solicitó mantener su identidad bajo reserva. ‘Existe el principio de la igualdad en las cargas públicas, que establece que el Estado no puede gravar a un particular en su patrimonio, para beneficiar a todo el mundo, cargándolo solamente a él’, acotó.
Cabe destacar que hace pocas semanas, la Contraloría objetó 11 de los 25 artículos que poseía la ordenanza de humedales de Valdivia, indicando que el municipio solo puede tener injerencia —para aplicar dicha normativa— en terrenos exclusivamente municipales o bien en humedales ubicados en bienes nacionales de uso público.
Para el senador Alfonso de Urresti (PS), quien presentó un proyecto de ley para proteger los humedales urbanos, Bienes Nacionales ‘debe determinar cuáles son las áreas que están inundadas y que por tanto pasan a dominio del fisco’.
De Urresti, además, rechazó de plano la idea de compensar a los particulares cuyos terrenos posean algún humedal que quiera ser protegido por el Estado. ‘En Valdivia ocurre un aprovechamiento de privados que con el pretexto de tener dominio hacen ocupaciones ilegales (…) Debieran asumir la pérdida (económica)’, dijo.
En tanto, en agosto pasado, la Corte Suprema ordenó el traslado —en un plazo de tres años— del Colegio Da Vinci School, construido sobre el humedal Llantén de Puerto Montt.
El fallo indica que si bien el recinto educacional contó con el respectivo permiso de edificación municipal, ‘dichas autorizaciones pasaron por alto’ que el referido cauce es parte del Plan Maestro de Evacuación y Drenaje de Aguas Lluvias en Puerto Montt, y por consiguiente, ‘cualquier modificación en su entorno debía ser evaluada bajo ese perfil’.