El agujero de ozono afectó la caída de lluvias, pero su disminución no revertirá la situación debido al cambio climático. Más aún, su cierre definitivo en 2060 podría significar el derretimiento de la Antártica, por el alza en la concentración del gas. Fuente: Diario Financiero, 14 de abril de 2020.