
Gobierno concluye convenio para operar cromatógrafo de Puchuncaví tras no cumplir estándares técnicos
El convenio para operar el cromatógrafo en Puchuncaví finalizará sus funciones según la Secretaría Regional Ministerial del Medio Ambiente de Valparaíso. A pesar de una nueva red de 14 estaciones de monitoreo público, la eficacia ha sido cuestionada por comunidades locales. El equipo, instalado en 2023 para controlar emisiones en Concón, Quintero y Puchuncaví, no cumplió con los estándares técnicos, llevando a su cese. La incertidumbre reina sobre quién asumirá la operación de los equipos si la UPLA se retira, mientras organizaciones locales culpan al seremi Galleguillos por la crisis de gestión. Fuente: Radio Bio Bío, 21 de octubre de 2025.
La Secretaría Regional Ministerial del Medio Ambiente de Valparaíso anunció que pondrá final al convenio para operar el cromatógrafo en Puchuncaví, en la denominada “zona de sacrificio”.
Como alternativa, actualmente opera una nueva red de 14 estaciones de monitoreo público con datos en línea. Sin embargo, comunidades y dirigentes locales han cuestionado su eficacia real.
Recordemos que activistas ambientales denunciaron que el cromatógrafo instalado por el Ministerio del Medio Ambiente de Chile en Puchuncaví no funciona desde el 16 de octubre, lo que ha generado un vacío en la medición de compuestos tóxicos como benceno y tolueno.
Dicho equipo forma parte de un proyecto impulsado en 2023 mediante un convenio entre la Universidad de Playa Ancha (UPLA) y la Subsecretaría del Medio Ambiente, con la finalidad de complementar la antigua red privada y fortalecer el control de emisiones en Concón, Quintero y Puchuncaví, en medio de un contexto de alerta sanitaria.
El seremi de Medio Ambiente, Alex Galleguillos, afirmó que la decisión de poner fin al convenio se adoptó debido a que este no cumplía con los estándares técnicos requeridos.
Ante esta determinación, el Consejo para la Recuperación Ambiental y Social de Quintero y Puchuncaví (CRAS) advirtió que la nueva red no siempre registra los episodios de intoxicación que afectan a estudiantes y vecinos.
Igualmente, se indicó que no existe claridad sobre quién asumirá la operación de los equipos si la UPLA se retira, lo que genera incertidumbre en plena crisis ambiental.
Nielz Cortés, consejero del CRAS, enfatizó que la magnitud de la crisis en la zona requiere ampliar las redes de monitoreo de gases.
La decisión implica que la UPLA devuelva los sensores Gray Wolf y el cromatógrafo adquiridos por el Gobierno Regional de Valparaíso. Al respecto, organizaciones locales responsabilizaron políticamente al seremi Galleguillos, por la crisis de gestión. En ese sentido, exigieron que el ministerio defina un plan claro para mantener operativa la red o que permita a la UPLA continuar con el monitoreo.
En un comunicado, la UPLA explicó que enfrentaron dificultades operativas ajenas a su gestión, como cortes de energía en establecimientos y problemas de conectividad, lo que derivó en demoras en la calibración y reparación de equipos.
Esto, sumado a la falta de financiamiento basal para asegurar su continuidad, obstaculizó la operación de la red, que actualmente se encuentra suspendida de manera temporal tras la solicitud de cierre anticipado del convenio por parte de la contraparte.