Luego de análisis de laboratorio del SAG, se descartó que las aves tuvieran la patología Influenza Aviar, por lo que lo más plausible es que su muerte se debiera a succión de agua de mar que realiza la central termoeléctrica. Tras la fiscalización en terreno de la Oficina Regional de la SMA al proyecto, se constató que en la evaluación ambiental de este no se proyectaron efectos en la avifauna. Fuente: El Diario de Atacama, 23 de mayo de 2023.