Más de 22 mil hectáreas de bosque nativo fueron taladas desde 2008 a la fecha bajo este instrumento para ser reemplazadas por cultivos agrícolas destinados en su mayoría a exportación. Flavia Liberona, directora ejecutiva de Fundación Terram, señala que “el dictamen de Contraloria nos permite tener certeza de que estas autorizaciones de corta son ilegales”.