Fundación Terram determinó, además, que 330 hectáreas de vegetación nativa urbana en Quilpué y Viña del Mar desaparecieron con el siniestro. Entre las especies arbóreas perdidas, están agrupaciones de palma chilena, belloto del norte (monumento natural), naranjillo (en peligro de extinción), además de peumos, quillayes y litres.